El año 2013 se inaugura con importantes cambios fiscales a la hora de comprar casa. Acaban los beneficios fiscales por la adquisición de una vivienda. Y los hipotéticos compradores lo sabían. Así se explica el ligero repunte de la venta de pisos en el último trimestre de 2012.

La eliminación de la deducción por vivienda en el IRPF, de la que se benefician aproximadamente 5,5 millones de contribuyentes, es uno de los principales cambios en la fiscalidad que entran en vigor coincidiendo con el comienzo de 2013.

Esta deducción, que se suprime desde el 1 de enero, era una de las principales partidas de los beneficios fiscales del IRPF. Esta deducción por comprar casa suponía un descuento del 15% sobre lo abonado por su adquisición con un límite de 9.040 euros.

Se suprime para las compras de viviendas que se realicen a partir del 1 de enero de 2013, pero no se aplicará la eliminación con carácter retroactivo, por lo que los ciudadanos que ya se benefician de la misma podrán seguir aplicándosela. Con esta medida, el Gobierno prevé recaudar 90 millones de euros.

Desaparece también la deducción por obras de mejora en los inmuebles, que hasta ahora era de un 20% sobre una base máxima anual de 6.750 euros.

Quienes compren casa desde el 1 de enero no solo no podrán beneficiase en la declaración de la Renta sino que pagarán más, más IVA, que sube, pasando del 4% al 10%.

De igual modo se pagará más IVA en las obras de renovación, que del 4% pasa también al 10%, y en la reparación de edificaciones destinadas a viviendas –del 8% al 21%–.

Finalmente, con el nuevo año se suprime la exención de la mitad de las plusvalías futuras de las viviendas. De este modo, quienes compraron una vivienda piso entre julio y diciembre de 2012 tributarán solo por el 50% de las plusvalías que consigan cuando la vendan.