El censo 2011, cuyos trabajos comienzan este septiembre, está levantando polémica. ¿La razón? Su nuevo modelo, que deja de ir casa por casa, como explicaba el diario El País.

En esta ocasión solo el 10% de la población será encuestada -unos cinco millones, cuando en anteriores ediciones se visitaron unos trece millones de hogares- y se complementará con los datos del padrón. Antonio Argüeso, subdirector general de Estadísticas Sociodemográficas del Instituto Nacional de Estadísticas (INE), explicaba a El País lo siguiente: "Empezar de cero es una pérdida de tiempo y de dinero descomunal".

En tiempos de crisis, el coste de realizar esta operación fundamental será de entre 80 y 90 millones, frente a los cerca de 400 que costaría hacerlo como antes -la última edición costó unos 165 millones-. Igualmente, se pasará de contratar 40.000 encuestadores a solo 5.000.

La polémica viene a que algunos especialistas consultados por este y otros diaros como El Periódico consideran que dejaría de ser exhaustivo -un valor que aparece en la definición de censo en la propia web del INE- y los datos sobre minorías o barrios serían menos fiables. Aún así, entre las voces consultadas por los diversos medios hay distintas posiciones.

Fuentes del INE consultadas por 20minutos.es se muestran soprendidas de algunos titulares con los que se ha calificado este nuevo censo: "No es un sondeo como se ha escrito, va a ser la mayor operación estadística". Se muestran confiados con que con el 10% de encuestados se obtendrá el mismo nivel de detalle.

Igualmente recuerda que esta misma tendencias censales ya se siguen en otros países europeos -Alemania y Suiza, por ejemplo- y defienden que dará "datos de mayor calidad y se adapta mejor a la realidad", al ser una encuesta continua.

"El objetivo presupuestario no es el prioritario", aseguran desde el INE. "Desde hace tres años se estudia cómo hacerlo y este tendrá mayor calidad, además de explotar los datos del patrón, tiene menos cargas de respuesta, menores complejidades de formación a encuestador y, también, un importante ahorro de costes".