La plaza de la catedral de Estrasburgo recuperó esta semana, por imperativos de un guión cinematográfico, el aspecto que debió tener en 1891 durante el atentado registrado en los actos de celebración del vigésimo aniversario de la anexión de Alsacia-Lorena al imperio alemán. Era la primera escena de la superproducción de Hollywood Sherlock Holmes II, cuyo rodaje comenzó en esta ciudad del este de Francia.

Tras la exitosa primera parte del Sherlock Holmes (2009) de Guy Ritchie, basada en el cómic de Lionel Wigram y en los personajes de Arthur Conan Doyle, el secretismo es absoluto respecto a la segunda parte. La escena, preparada para tres días de rodaje, será de muy corta duración y su coste  ronda el millón de euros (unos 1,3 millones de dólares). El rodaje de la película cuenta con 200 extras y 400 técnicos.

En ella, según adelantó el vicealcalde de la ciudad, Robert Hermann, se reproduce la citada ceremonia oficial, en la que se simula un atentado que, según los estudiosos, iría dirigido al emperador Guillermo II, que acostumbraba a desplazarse cada año a Estrasburgo.

Durante dos semanas, se cambió la imagen de la plaza de la Catedral y de la rue Mercière, para asemejarla a la de los últimos años del siglo XIX e intercambiar los letreros en francés por otros en alemán. La zona exterior de los comercios fue redecorada y los dueños indemnizados por la semana de cierre. Una tienda de galletas, una de recuerdos y una cervecería se convirtieron en una panadería, una tienda de porcelana y una floristería.

En la secuencia no faltaron caballos, calesas y carretas, así como escaparates fabricados con azúcar para captar mejor la proyección de polvo y elementos ligeros que simularán el atentado. En la rue Mèrciere se instalaron estandartes de la época a ambos lados de la calle, mientras que junto a la fachada de la Catedral se situó la tribuna oficial. Un gran cartel recordaba en letras góticas alemanas el vigésimo aniversario de la anexión.

Sherlock Holmes II, que se estrenará en los primeros meses de 2012, se beneficia del crédito internacional de impuestos que contempla el Centro Nacional de la Cinematografía francés para el rodaje en Francia de producciones extranjeras.

Estrasburgo ha sido escenario de películas como El nacimiento de la Marsellesa (1936), de Jacques Séverac; La Virgen del Rin (1953), de Gilles Grangier, con Jean Gabin; y Julia (1977) de Fred Zinnemanm, con Jane Fonda, Vanessa Redgrave y Meryl Streep.