Parir en casa en vez de en el hospital, ¿opción razonable o riesgo innecesario?

Un recién nacido, en una imagen de archivo.
Un recién nacido, en una imagen de archivo.
20MINUTOS.ES
Un recién nacido, en una imagen de archivo.

Hay dos fotografías igualmente tópicas. En una, la mujer da a luz, asediada de aparatos y de personal médico extraño, en una fría habitación de hospital. En la otra, la embarazada levanta al recién nacido, rodeada de su familia, en la acogedora intimidad de su dormitorio.

En las sociedades modernas, la mayoría de niños vienen al mundo en los hospitales. En España, un porcentaje mínimo lo hace en el domicilio familiar (la Seguridad Social, al contrario que en países europeos como Holanda, no financia este tipo de partos privados).

Ahora, el debate sobre las ventajas e inconvenientes -médicas, económicas y legales- de esta práctica ha vuelto a aflorar tras el fallecimiento en Cáceres de un bebé que nació en casa, asistido por una matrona.

Hacia un parto más natural

"En las décadas de los sesenta y setenta el parto se medicalizó en exceso", dice José Ángel Espinosa, jefe de obstetricia del Hospital Universitario Quirón de Madrid. Los índices de mortalidad bajaron, pero como reacción a tanto "intervencionismo" surgió un movimiento que abogaba por "naturalizar al máximo" el proceso, evitando en la medida de lo posible el ingreso hospitalario.

Como reacción a estas dos corrientes "extremas" se comenzó a difundir, hace un par de décadas, una práctica que combinaba la seguridad de las modernas técnicas médicas con una atención cuidadosa (lo menos artificial posible) hacia la parturienta. Es lo que en medicina se conoce como 'nueva obstetricia'.

"El objetivo ahora es reducir la hostilidad", dice Espinosa, "a través de reducir las dosis de medicamentos, evitando el rasurado o favoreciendo la técnica 'piel con piel' [ofrecerle cuanto antes el recién nacido a su madre]". Pese a ello, sigue habiendo mujeres que prefieren dar a luz en el domicilio.

Maricarmen, de la Asociación Nacer en casa, defiende esta opción porque la considera "meditada y autónoma". "No se trata de correr riesgos", asegura, "sino de favorecer el protagonismo de la mujer". Es una cuestión de "valores" y "no manipulación de la mujer".

Más protagonismo activo de la mujer

Con el fin de humanizar el parto, el Ministerio de Sanidad puso en marcha en 2007 un plan para favorecer la armonía, dar más protagonismo activo a la mujer y ofrecer cuidados individualizados. Además, la denominada Estrategia de Atención al Parto Normal tenía como objetivo mejorar la formación de los profesionales sanitarios gracias a diferentes programas de formación.

Era una medida que el colectivo de matronas llevaba tiempo reclamando. "Hay que reducir la instrumentalización a casos en los que sea realmente necesario... A veces se aplican fórceps o ventosas sólo para que alguien aprenda a usarlos y eso no puede ser", decía entonces María José Espinaco, matrona vocal del Consejo Nacional de Enfermería.

El debate, a pesar de todo, sigue abierto. ¿Merece la pena correr el riesgo de efectuar un parto casero? A continuación, algunas de las ventajas e inconvenientes que dicha opción conlleva.

VENTAJAS

  • Intimidad
  • Cercanía y apoyo familiar
  • Precio

INCONVENIENTES

  • Vigilancia pre y post parto menos intensiva
  • Menos capacidad de reacción en el caso de percances imprevistos
  • Falta de medios técnicos para contratiempos graves como desprendimientos de placenta, procidencia del cordón umbilical, etc.
Mostrar comentarios

Códigos Descuento