Estudiar para trabajar

Tras acabar sus estudios en el instituto, Nuria marchó a Zaragoza, se licenció en derecho e hizo un máster. Después se fue un año a Canadá para mejorar el idioma. «La experiencia fue realmente buena –recuerda–. Allí todo es accesible, sin duda, están a años luz de nosotros en cuanto a barreras».

Al volver, se instaló en Madrid por motivos laborales. «Empecé en un despacho de abogados muy pequeño. Al cambiarse de edificio, no pude acompañarlos por problemas de accesibilidad en la nueva sede».

Tras esta experiencia, Nuria se dedicó a luchar por gente como ella. «Trabajé en una organización para buscar empleo y formación a personas con discapacidad».

Hoy, Nuria Aparicio ejerce la abogacía en un importante bufete. Se siente muy a gusto, aunque confiesa que al principio fue difícil. «Sea cual sea tu lesión, si te lo propones de verdad, lo consigues. Hay mucha gente como Ramón Sampedro que desea morir, pero creo que esto, sobre todo, es porque no disponen de recursos para entender que no todo está perdido».

BIO

Nació en Segovia en 1970, estudió la carrera de derecho en la Universidad de Zaragoza, donde también realizó un máster. Actualmente, vive y trabaja en Madrid, en un bufete de abogados.