El incendio ha quedado controlado pero la madera quemada mantiene por dentro el fuego, por lo que esperamos que en las próximas horas quede definitivamente extinguido", informó Jorge Bonet, responsable del Consorcio de Bomberos de la isla.

El incendio ha afectado también a la librería Diocesana y a la sede de la Universidad Nacional de Educación a Distancia (UNED), edificios colindantes del Obispado.

El fuego, según el presidente del Gobierno de Canarias, Adán Martín, podría haberse iniciado como consecuencia de un cortocircuito.

El fuego no ha ocasionado daños personales pero, según la alcaldesa de La Laguna, Ana Oramas, se da por perdida la sede del Obispado de Tenerife, ubicada en el Palacio de Salazar, un edificio barroco del siglo XVII.

Finalmente el fuego pudo ser controlado con la ayuda de dos helicópteros del Grupo de Intervención de Emergencias (GIE) que realizaron 28 descargas de agua, afirmaron fuentes del CECOES.

El paso de las llamas a los edificios colindantes se produjo después de que se desalojasen las casas próximas al Obispado de Tenerife en las calles Juan de Vera, Tabares de Cala, San Agustín y Anchieta.

El fuego se inició en una sala próxima al lugar en el que estaban reunidos los vicarios.

El presidente del Cabildo de Tenerife, Ricardo Melchior, que también se trasladó hasta La Laguna, subrayó que es imposible cuantificar las pérdidas económicas causadas por el fuego y señaló que "hay cosas que no tienen precio".

Una tragedia irreversible

El delegado del Gobierno en Canarias, José Segura, recordó el incendio ocurrido en la iglesia de San Agustín de La Laguna en 1964 y mostró su pesar por la destrucción de patrimonio.

Segura dijo que se trata de tragedias imprevisibles, opinó que no se puede hablar de desidia de nadie y expresó el desgarro intelectual y humano que se supone este suceso dada la "afectividad" que el Obispado representa para los canarios. El concejal de Seguridad y Tráfico de La Laguna, Fernando Clavijo, explicó que el hecho de que la sede del Obispado de Tenerife sea de madera dificulta las tareas de extinción. Fernando Clavijo indicó además que no se cree que haya problemas para salvar el archivo histórico del Obispado de Tenerife, ya que está en un búnker ignífugo.

La sede del Obispado de Tenerife está en el Palacio de Salazar, construido en 1664 y constituye uno de los inmuebles por los que el casco histórico de La Laguna fue declarado en 1999 por la Unesco Bien Cultural Patrimonio de la Humanidad.

El edificio fue construido por orden de los condes del Valle de Salazar, que fijaron allí su residencia, y su fachada fue ejecutada en 1681 por los maestros canteros Juan Lizcano y Andrés Rodríguez Bello.

Dada sus características de tendencia barroca esta fachada está considerada como uno de las mejores muestras de la arquitectura civil de Canarias. Según información del Cabildo de Tenerife, antes de ser adquirido en el siglo XIX para sede de los obispos nivarienses y de las oficinas de la Curia, funcionó en él el Casino El Porvenir.

En el piano de esta sociedad, el compositor Teobaldo Power compuso la mayoría de sus Cantos Canarios, que se han constituido con el tiempo en el himno de Canarias.