El líder de CiU, Artur Mas, ha anunciado que, de gobernar en Catalunya tras las elecciones de otoño, su partido devolverá el protagonismo al tejido asociativo y a las entidades privadas, "con una gran tradición en nuestro país", para "coliderar" las políticas sociales públicas "sin tanta proclama y desde una óptica más realista".

A su juicio, el tripartito "ha ahogado a la iniciativa privada levantando banderas que ha sido el primero en recortar. Tanto en Madrid como en Catalunya han practicado pero no han pregonado", ha afirmado en el centro de convenciones Mas Sedó de Reus (Tarragona), donde ha celebrado una reunión de trabajo sobre políticas sociales.

Mas, que ha criticado "una herencia con el 18% de paro, un 20% de personas en el umbral de la pobreza, y un tercio de jóvenes en situación de fracaso escolar", ha defendido un modelo de "derechos y obligaciones", de garantía del estado del bienestar desde una óptica pedagógica que guíe a los ciudadanos al uso sin abusar de unos servicios sociales "a proteger entre todos".

CiU introducirá en su programa la voluntad de "priorizar y gastar mejor para ganar en eficiencia". "Tenemos que generar más rendimiento con el mismo dinero, aplicar a la administración las capacidades de gestión de las empresas, los autónomos y las familias, porque subir los impuestos es lo más fácil, pero no es una medida asumible en plena crisis", ha defendido.

Según Mas, el modelo de protección social pasa, en primer lugar, por reactivar la economía, con la sensibilidad suficiente para una distribución justa de la riqueza que haga realidad "el derecho a decidir entre la asistencia pública o privada al conjunto de la sociedad, independientemente de sus recursos", pues "las familias acomodadas ya pueden elegir a día de hoy" en cuestiones tan importantes como la asistencia a mayores dependientes o discapacitados.