El Ayuntamiento de Santander pondrá en marcha a mediados de julio y de forma progresiva el servicio de catering social, del que se beneficiarán un máximo de 38 personas a final de año.

Los beneficiarios ya están siendo seleccionados por los Servicios Sociales municipales entre los usuarios del servicio de ayuda a domicilio, ya que el catering se dirige a personas mayores de 65 años, dependientes o discapacitados, que viven solos y tienen pocos recursos.

El precio que deberán abonar por comida oscila entre uno y 3,34 euros, en función del Indicador Público de Renta de Efectos Múltiples (IPREM), porque el servicio está subvencionado por la Fundación Cántabra para la Salud y el Bienestar Social del Gobierno de Cantabria, que asume el 65% del coste —un total de 125.000 euros para este año—, y el Ayuntamiento, que se encarga del 35% restante, si bien esta institución ha llegado a un acuerdo con la Fundación Bancaja, que financiará el 50 por ciento de la cantidad que corresponde al Consistorio.

Así lo anunció hoy en rueda de prensa el alcalde de Santander, Íñigo de la Serna, quien explicó que el catering social es un servicio complementario a los de ayuda a domicilio y teleasistencia, que se hace necesario debido al "progresivo incremento" del número de personas dependientes y la conveniencia de que éstas permanezcan en su entorno.

El catering, que se llevará a los domicilios tres veces a la semana, incluye primer y segundo plato, postre y pan, que se colocarán en recipientes herméticos, de forma que el usuario sólo tendrá que calentarlos. Se trata de una alimentación adecuada a las necesidades nutricionales de cada persona, por lo que será un dietista quien elabore los menús.

El alcalde explicó que el servicio comenzará de forma progresiva a mediados de julio, hasta atender a un máximo de 38 personas a final de año, una cifra que se corresponde con las necesidades de ayuda a domicilio, según el estudio realizado por los Servicios Sociales. No obstante, el número de usuarios podría incrementarse en función de las necesidades que se detecten.

Otros programas

De la Serna destacó que esta medida supone un "refuerzo" de las políticas sociales municipales y en este sentido recordó que el nuevo programa se suma al de viviendas tuteladas, puesto en marcha por el Ayuntamiento hace un mes.

En este sentido, el alcalde informó que ya se ha firmado un convenio con Nuevo Futuro para acoger a mujeres embarazadas o con hijos a su cargo que carezcan de recursos. Esta organización ha comenzado a evaluar a las posibles beneficiarias, así como a reparar las viviendas cedidas por el Ayuntamiento. La previsión es que las mujeres puedan entrar a vivir a finales de julio.

Además, según recordó De la Serna, también en el plazo de un mes, cuando el Gobierno central anunció sus recortes, el Ayuntamiento ha adjudicado el centro de atención a personas dependientes de Valdenoja, actuación que incluye una guardería, y ha iniciado las obras de la guardería laboral de Candina, que atenderá a 85 años desde comienzos del año próximo.

Asimismo, el Ayuntamiento ha prestado apoyo laboral a la asociación Síndrome de Down, con un nuevo trabajador en el Centro Cívico Callealtero, y ha dado luz verde a un nuevo servicio gratuito de intérprete de lengua se signos.

Todas estas medidas, según el regidor, "refleja el compromiso del equipo de Gobierno con quienes más lo necesitan", con el fin de que "no paguen la crisis los más débiles", concluyó.