El jardín, un espacio hasta ahora conocido como 'Huerta de los Briz' y recuperado recientemente por el Ayuntamiento, fue inaugurado por la hija menor del escritor, Camino Delibes, y el alcalde de Segovia, Pedro Arahuetes, quienes estuvieron acompañados por una amplia representación de la corporación municipal, además otras autoridades locales y provinciales.

El acto comenzó con la lectura, por parte de la secretaria de la Corporación, Eva Martín, del acuerdo de pleno, adoptado por unanimidad el pasado 30 abril, para atribuir al espacio el nombre del escritor y académico vallisoletano.

A continuación, se produjo la bendición del jardín a cargo del obispo de la Diócesis, Ángel Rubio, mientras que en su intervención, el alcalde subrayó que con este gesto Segovia quería "testimoniar su profunda admiración" por una de las figuras "más importantes" de la literatura "y uno de los más grandes escritores de lengua castellana de todos los tiempos".

En su discurso, cargado de referencias a la obra del escritor, Arahuetes se mostró convencido de que Delibes hubiera disfrutado "de este trozo de naturaleza fusionado con las viejas piedras de Castilla a la que tanto amó".

Tras recibir de manos del alcalde un ramo de rosas blancas, la hija del escritor agradeció a la corporación municipal, en nombre de la familia Delibes, la decisión de bautizar la 'Huerta de los Briz' con el nombre de su padre.

"Estoy segura que él desde algún sitio está aplaudiendo esta iniciativa porque nada le gustaría tanto como el hecho de que un parque llevara su nombre", dijo antes de recordar que son "muchas" las calles, colegios y centros culturales que lucen su rótulo con el antropónimo de Miguel Delibes para, a continuación, reconocer que es la primera vez que figura en un jardín.

"incansable defensor de la naturaleza"

La hija menor del escritor recordó que su padre fue un "gran aficionado al campo" y un "incansable defensor de la naturaleza" y que, por el hecho de haber vivido en la ciudad, siempre que podía "buscaba el abrigo de los jardines municipales para pasear o leer el periódico a la sombra de algún arbol centenario".

"Sin embargo el Campo Grande de Valladolid no sólo era para él un lugar de reposo: conocía toda la flora y la fauna del lugar y no era raro encontrarle en animada charla con los jardineros, interesándose por las plagas de los árboles, por la desaparición de los gorriones o por la llegada adelantada de la primavera", recordó.

Camino Delibes se mostró convencida de que si su padre "pudiera volver" acudiría a Segovia "a pasear por este jardín que transmite tanto sosiego".

Tras sus palabras, Camino Delibes y el alcalde descubrieron un hito de piedra caliza en el que figura la nueva denominación de este jardín y, a continuación, la hija del escritor y las autoridades realizaron un breve paseo por el espacio, desde donde se observa una espectacular panorámica del valle del Eresma.

La adecuación del jardín supuso una inversión de 210.000 euros aportados por el Ministerio de Cultura (110.000 euros), el Ayuntamiento de Segovia y la Junta de Castilla y León (50.000 euros cada uno).