Según informó hoy la institución foral, la temporada se mantendrá abierta hasta el 30 de septiembre en las zonas libres como el embalse de Artiba en Alonsotegi, Zollo en Arrankudiaga, Oiola y Castaños en Baracaldo, Aixola en Ermua, Aranzelai y Lekubaso en Galdakao, La Pesquera en Galdames, La Cuadra en Gueñes y los pozos Vinagre y Jarralta en Sopuerta.

Respecto al número máximo de especies capturables de trucha común y trucha arco-iris, son cuatro al día excepto en los tramos acotados de Atxuriaga/La Ceña (1 ejemplar), Coto de Balmaceda (2 ejemplares) y el Coto de Undurraga (6 ejemplares).

Las dimensiones mínimas tanto en tramos libres como en acotados serán: Trucha común y arco-iris (22 centímetros), Anguila (20 cm.), Perca negra (8 cm.), Barbo (18 cm.), Carpa (18 cm.), Carpín (sin talla), Loina (10 cm.), Tenca (sin talla), Lubina (20 cm.), Muble (20 cm.) y Platija (14 cm.).

La utilización como cebo de los peces vivos o muertos está prohibida excepto en el embalse de Undurraga. Asimismo, queda prohibido cebar las aguas antes o durante la pesca, salvo en embalses y con autorización administrativa.

Se prevé que más de 12.000 pescadores participen en la campaña de pesca de este año. Ellos deberán portar los documentos necesarios para poder ejercitar la pesca fluvial en el País Vasco; la licencia Autonómica de Pesca del País Vasco, Justificante del pago anual de la tasa correspondiente, DNI o pasaporte y en caso de los cotos, se deberá presentar la autorización correspondiente, personal e intransferible.

Gestión sostenible

Durante la presente temporada de pesca, a fin de satisfacer las demandas de los aficionados y de garantizar, al mismo tiempo, la restauración de la fauna y, por tanto, la gestión sostenible de los recursos piscícolas, la Diputación Foral de Bizkaia repoblará los ríos vizcaínos con 50.000 truchas.

El Departamento de Agricultura de la Diputación Foral de Bizkaia realizará sueltas de 18.000 ejemplares de trucha autóctona y 10.000 salmones que no se podrán ser objeto de capturas.

La Diputación desempeña una importante labor para el afianzamiento de la trucha autóctona y, una vez superada una analítica de pureza genética, serán puestas en libertad esta primavera. Los salmones tampoco podrán ser capturados, quedando fuera de la orden de vedas.