El alcalde, Javier León de la Riva, aseguró ayer que ha «desistido» de llevar a cabo el Día sin Coche como tal y ha optado por colaborar y dar facilidades en lugar de «cabrear» a los conductores, algo que «no valía la pena».

«La Semana de la Movilidad tiene que ir calando como la lluvia fina», afirmó, a la vez que añadió que no es partidario de «soluciones drásticas» como las que plantean otros « y menos en este caso».

«Ya se cabrea a la gente con obras o problemas que surgen y que son inevitables, por eso hemos optado por colaborar y dar facilidades», comentó a Europa Press. «Es lo mismo que han hecho otras muchas ciudades».

En Valladolid sólo se notó el Día sin Coche en el precio del autobús, que costó 15 céntimos, en que se pudo aparcar gratis en la Feria de Muestras y en la marcha ciclista que hubo entre la Acera Recoletos y Puente Duero.

Criticas

Numerosos colectivos como Ecologistas, IU, los Vecinos y Asamblea Ciclista criticaron las escasas medidas que se toman para desterrar el coche de la ciudad.

Esta última organización celebró ayer una marcha reivindicativa por el centro de la ciudad.