Ese mismo día, Allen tuiteaba en su página y contaba los percances de su malestar: "Me encantaría estar en Benicàssim, pero he estado vomitando todo el día. Gracias a la mujer que me dio una bolsa para vomitar en el aeropuerto de Gatwick esta mañana".

Incluso daba detalles del tipo de bolsa que le habían ofrecido: "Una bolsa de papel, fue en la terminal norte".

El lunes, un día después de la fecha en la que debería haberse subido al escenario castellonense, la vocalista volvía a conectarse a su Twitter: "Es una mierda, siento lo de ayer, pero estoy enferma". Y añadía: "Nunca había oído hablar de ese festival francés". ¿Se refería Allen al FIB?

Para tranquilidad de sus fans, el día 25, Allen, completamente  recuperada, escribía desde el espectacular hotel en el que se rodaron algunas de las imágenes Lost in Translation de Tokio. Y aseguraba que los últimos días habían sido una pasada, "big fun".