La crisis no parece tomar un descanso ni siquiera en verano. Según datos proporcionados por Confederación Española de Hoteles (CEHAT), los hoteles han tenido que reducir sus precios en un 15% durante los seis primeros meses del año. Ante la complicada situación económica, el sector hotelero se ha visto obligado a lanzar ofertas para afrontar la actual crisis, lo que ha supuesto una bajada de la rentabilidad con respecto a 2008.

El presidente de la CEHAT, Juan Molas, ha augurado que los hoteles generarán 50.000 empleos menos para cubrir la demanda del próximo verano. Esto supone un descenso del 15% respecto a los 1,5 millones de trabajadores contratados en 2008, aunque puntualizó que a partir del 15 de junio la caída podría estar en el 4%.

En cuanto a la situación hotelera en diferentes lugares de España, la CEHAT se muestra preocupada por Menorca, Lanzarote y Fuerteventura, donde se han dado fuertes caídas de reservas para las vacaciones. Por otro lado, si que parece mejorar la situación en la costa mediterránea y Mallorca.

Temporada alta y corta

Como consecuencia de la crisis y la pérdida del poder adquisitivo de los españoles, los hoteleros consideran que la temporada baja va a ser muy larga, y la alta muy corta. Este verano, las estancias largas y las de 7 y 15 días decrecerán. Un 82% de los hoteleros prevé una caída de turistas  extranjeros que pueden elegir como destino otros países como Turquía, Egipto y Croacia.