Continúa la polémica por el pago de las Superlicencias de Fórmula 1. Hace meses que los pilotos 'luchan' en una guerra abierta contra la FIA por el precio de las Superlicencias, pero ahora parece que dan marcha atrás, o, al menos, eso piensa Kimi Raikkonen.

El piloto de Ferrari dice en el Corriere della Sera que "todos están más o menos de acuerdo a la hora de pagar la licencia, es sólo que el prcio debe ser razonable. Es el único problema. nadie quiere discutir con nadie.

Alto precio

Al precio total de la licencia, cada piloto deberá abonar 2.100 euros por cada punto conseguido en el Mundial y un seguro obligatorio de 2.720 euros. La Asociación de Pilotos de Gran Premio (GPDA) no está de acuerdo con este incremento, lo que supone que el campeón del mundo Lewis Hamilton tendría que pagar 218.920 euros por poder correr en el 2009.

La GPDA pidió a sus asociados que no abonen la superlicencia mientras continúa su negociación con la FOTA (Asociación de Equipos). Los pilotos llegaron a señalar la posibilidad de hacer una huelga para protestar por este "abusivo" incremento de precio.