El Servicio Federal Antimonopolio (SFA) de Rusia ha impuesto una multa millonaria a la petrolera Lukoil, interesada en adquirir parte del capital de Repsol, por abuso de su posición dominante en el mercado y establecimiento de precios excesivos. También ha sido sancionada la compañía Rosneft.

La multa a Rosneft asciende a 1.508 millones de rublos (37 millones de euros al cambio actual) y la de Lukoil a 1.443 millones de rublos (casi 36 millones de euros). Los expedientes contra las dos petroleras fueron abiertos el 30 de octubre pasado.

Según el SFA, las acciones de las compañías, que a finales de 2007 y en la primera mitad de 2008 llevaron una brusca subida de los precios de los combustibles, tuvieron un impacto negativo en distintos sectores, entre ellos la agricultura.

La rusa Lukoil podría convertirse en el principal accionista de Repsol si prosperan sus negociaciones para comprar parte del capital. No obstante, la compañía ha insistido en que no hay acuerdo y ha moderado recientemente sus aspiraciones iniciales, tanto en la española como en sus operaciones en el extranjero, por la crisis financiera internacional.