Al parecer, el supuesto parricida sufre esquizofrenia. El crimen ocurrió a las tres de la mañana. Los primeros en llegar a la casa, situada en las afueras del casco urbano de Monforte de Lemos, fueron los sanitarios de una ambulancia enviada por el servicio de emergencias 112.

Los agentes encontraron el cuerpo de la víctima en el cuarto de baño anexo a la habitación de matrimonio. Tenía graves heridas en la cara y en la cabeza, que habían sido producidas al parecer con el mango metálico de la escobilla del váter.

Los policías se encontraron al hijo de la víctima muy agitado y tuvieron que reducirle por la fuerza para detenerlo. Por ahora, no se sabe prácticamente nada de las circunstancias concretas en las que se produjo el crimen. La noche pasada, la víctima y su hijo se encontraban solos en la casa en la que también viven el marido y una hija. No hubo testigos directos de lo ocurrido y el detenido todavía no ha aclarado nada.

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