Las asociaciones de familiares de víctimas del franquismo y por la memoria histórica han recibido con sorpresa la decisión del magistrado de la Audiencia Nacional, Baltasar Garzón, de dejar en manos de los juzgados territoriales la investigación de los represaliados por la dictadura.

Aunque la sorpresa sea común, salvo excepciones, estos colectivos no valoran de igual forma esta decisión y, según los casos, se colocan entre un cierto optimismo y la más abierta decepción. Lo que sí tienen claro, en todos los casos, es que no van a dejar de trabajar y de luchar por sus convicciones.

Paqui Maqueda, secretaria de la Plataforma de Víctimas de Desapariciones Forzadas por el Franquismo.

"Es un auto que nos cae muy, muy de sorpresa. Garzón ha sido muy presionado y esto es consecuencia de la presión de la Fiscalía, que no se ha puesto del lado de las víctimas, y del Gobierno. Es una muestra que deja claro la distancia abismal que existe entre la sociedad civil y los jueces y políticos.

Supone un paso atrás porque, no hay que olvidar, que nosotros venimos de esos juzgados territoriales y allí no se nos recibió muy bien. En cualquier caso vamos a seguir hacia delante y no descartamos acudir al Tribunal Internacional de Estrasburgo.

El Gobierno no ha facilitado el camino, es más, Zapatero sentenció este proceso cuando afirmó que el franquismo ya había sido juzgado por la historia. Sólo nos ha ofrecido una ley que ha empezado a articular ahora y que no anula la sentencias franquistas y deja en las manos de familiares y voluntarios las exhumaciones."

Emilio Silva, presidente de la Asociación para la Recuperación de la Memoria Histórica.

"El documento de Garzón es una condena contundente a la dictadura, algo que no se han atrevido hacer los políticos en 30 años. Es en sí mismo, una reparación.

Por otro lado, antes había un juez ocupándose del caso y ahora habrá 27. Vamos a ver dónde va, si nos dan una ayuda efectivo, no me parece una solución mala.

Lo que no puede ser es que seamos nosotros los que estamos garantizando un derecho humano con una sepultura digna en nuestro país. Tristemente, el gobierno no ha decidido poner solución a este situación. Tiene capacidad pero no voluntad política. Si yo fuera presidente de un país dónde ocurre esto, no dormiría tranquilo."

José María Pedreño, presidente de la Federación Estatal de Foros por la Memoria Histórica.

"Supone algo que ya nos imaginábamos, no es ningún varapalo, porque nos devuelve a la situación de antes, cuando nuestras denuncias eran archivadas en los juzgados territoriales. Da la sensación de que todo esto de Garzón ha sido un brindis al sol.

Al final nos encontramos con  con otra maniobra del Gobierno y el Estado español para no impartir justicia a las víctimas del franquismo. No hay voluntad política por parte del Gobierno. Ningún gobierno ha querido asumir responsabilidades en este asunto, intentan parecer que sí, pero no hacen nada.

Se han creado falsas esperanzas en mucha gente pero, al menos, hemos sacado de positivo que se ha creado más consciencia y debate."