En total, la policía confiscó unos 300 kilos en bruto de marihuana, además de 11 gramos de lo que podría ser cocaína y 86 de hachís, según han informado fuentes policiales. Los detenidos, vecinos de Mollet del Vallès (Vallès Oriental), han pasado a disposición judicial acusados de un delito contra la salud pública.
Los agentes de la Guardia Civil iniciaron el pasado 23 de septiembre la investigación al tener la sospecha de que la finca podía acoger una plantación clandestina de sustancias estupefacientes. Días más tarde, los agentes comprobaron cómo los dos inquilinos de la casa colocaban al sol y transportaban de un lado a otro de la finca un número indeterminado de plantas, supuestamente de marihuana.
También detectaron una plantación ilegal en el exterior de la casa con hasta 51 plantas. Con esta información, la policía llevó a cabo este martes de madrugada la entrada por la fuerza y el registro del interior de la casa, donde encontraron diversas plantaciones más con unas 300 plantas de marihuana de diferentes alturas, en este caso conectadas al foco de luz artificial y ventiladores.
Alijo
También otras 150 plantas de marihuana con tiestos en el patio posterior. En total, la policía confiscó unos 300 kilos de marihuana en bruto. También, en el interior del dormitorio, la Guardia Civil encontró 11 gramos en diferentes dosis preparadas de forma presunta de cocaína y 86 gramos más de hachís.
Por todo, la policía detuvo a los dos jóvenes que vivían en la casa y supuestos propietarios de la plantación. Christian S.C. de 28 años y Sandra C.P. de 25 años, vecinos los dos de Mollet del Vallès (Vallès Oriental), han pasado a disposición del Juzgado número 1 de Gandesa.
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