El corredor vizcaíno Javier Otxoa se resarció de su discreta actuación en la pista del velódromo de Laoshan con un oro en la contrarreloj en carretera dentro de la categoría CP 3, reservada a ciclistas con parálisis cerebral, prueba en la que el barcelonés Maurice Eckhard acabó cuarto.

Otxoa cubrió los 24,8 kilómetros de que constó el recorrido, lo que supuso dar dos vueltas al exigente circuito de Changping, sede de las pruebas de triatlón en los pasados Juegos Olímpicos, en 37:26 (a una media de 39,742 kms/h), once segundos mejor que el británico Darren Kenny, intratable en Laoshan, donde logró tres oros.

Por su parte, Eckhard paró el crono en 38:47 y quedó a sólo dos segundos del bronce que se adjudicó el surcoreano Jin Yong-Sik (38:45).

El ex profesional vizcaíno, de 34 años, ya había anunciado que, tras las pruebas de pista, en las que fue descalificado en la persecución individual cuando ya tenía asegurada la plata y concluyó cuarto en el kilómetro contrarreloj, comenzaba una nueva historia en la carretera, que había preparado a conciencia.

Por otra parte, el bilbaíno Aitor Oroza se vio perjudicado por la reducción y consiguiente unión de categorías y no pudo pasar del séptimo puesto en la contrarreloj CP 1/CP 2, prueba reservada a corredores con parálisis cerebral, que se anotó el británico Stone, seguido del alemán Weise y del checo Mackova.