El tuning es cosa de todos. La personalización de vehículos tiene cada vez más adeptos entre los vigueses y tunear el coche no significa dejarse el sueldo del mes en él. O sí.

Los vigueses pueden gastarse hasta 50.000 euros en diferenciar su vehículo del de los demás. Y es que la esencia del tuning es esa: que dos vehículos de la misma marca y modelo sean diferentes.

Hay modos y modos de hacerlo y la inversión no tiene porqué ser muy alta. Joaquín, de Portabales Tuning, explica que puedes personalizar tu coche desde 30 euros. «Si colocas unos pedales o una palanca de cambios ya está personalizando tu vehículo, y eso ya es tuning», dice.

40.000 o 50.000 euros

Está claro que con cuatro cosas que añadas puedes tener un coche algo personalizado, pero si lo que realmente quieres es diferenciarlo de los demás, el presupuesto se incrementa. Hay gente que puede llegar a gastarse 40.000 o 50.000 euros en tunear su coche, y el taller Portabales realiza unos tres trabajos de esta envergadura cada año.

«Hemos llegado a colocar una pecera y un casino dentro de un coche», dice. Eso sí, este tipo de trabajos son minoritarios y llevan mucho tiempo: el coche puede estar unos seis meses sin salir del taller. Lo más normal es colocar defensas, faldones, llantas o pintar el interior o exterior del vehículo.

No es cuestión de edad

El tuning no tiene edad. La personalización de los vehículos la hacen chicos de 18 años que acaban de sacarse el carné y gente de 40. Aunque parece un mundo de hombres, cada vez más mujeres quieren marcar la diferencia con su vehículo. «Los jóvenes prefieren meter buenos equipos de sonido y personalizar el exterior. La gente de más edad opta por buenos equipos de navegación, calidad de sonido, seguridad y detectores de radares», explica Portabales.

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