Al menos cuarenta personas murieron este domingo en una zona fronteriza entre Ruanda y la República Democrática del Congo a causa de un terremoto de 6 grados en la escala de Richter, informaron fuentes oficiales y emisoras locales.

El epicentro se registró a orillas del lago Kivu, próximo a la población ruandesa de Cyangugu y de la localidad congoleña de Bukavu. El Ministerio de Salud de Ruanda informó oficialmente de la muerte de 34 personas y señaló que otras 231 resultaron heridas en territorio de ese país. Un recuento anterior de la emisora Radio Ruanda hablaba de 23 muertos en este país.

Derrumbe de una iglesia

Por lo menos diez de las víctimas, según Radio Ruanda, perecieron cuando se derrumbó una iglesia en el distrito de Rusizi. Por su parte, desde la capital congoleña, Kinshasa, la emisora local Radio Okapi dijo que en Bukavu habían perecido cinco personas y más de cien habían resultado heridas. En la vecina población de Kabare también se registró una víctima mortal, un niño.

Fuentes religiosas de la zona señalaron, no obstante, que los muertos en Bukavu pueden llegar a diez. Las fuentes de la Fuerza Aérea en Ruanda dijeron que los heridos por el movimiento telúrico han sido trasladados al hospital de la población de Cyangugu.

A 20 kilómetros de distancia

Según datos del Instituto Geológico de Estados Unidos, el movimiento telúrico se registró a las 09.34 hora local (07.34 GMT). El epicentro se sintió a veinte kilómetros del norte de Bukavu, dentro del territorio congoleño, y tuvo una profundidad de 10 kilómetros.

La zona del epicentro no tiene una gran densidad de población. La población más importante es la congoleña Bukavu. Después de este movimiento telúrico se registraron tres réplicas, en las siguientes dos horas, con magnitudes situadas entre los 4,5 y 5 grados en la escala Richter y a ambos lados de la frontera entre los dos países.