Será gracias al desbloqueo de tres conexiones viarias: La Encina-Alicante, La Alcoraya-Alicante y la variante que une Almansa (Albacete) y Alicante, tramos por los que discurrirá el ferrocarril, una vez saldadas con éxito las declaraciones de impacto ambiental llevadas a cabo por la Generalitat.

 

Esta actuación, junto a la ejecución del segundo tramo del soterramiento de las vías del tren a su paso por la ciudad (desde el puente rojo de la Gran Vía hasta la estación), 1.200 metros que se licitarán dentro de un mes, la futura estación intermodal y el plan urbanístico sobre los terrenos liberados de las líneas ferroviarias, conforman el plan de infraestructuras que Alicante acometerá en su meta de integrar el tren en la ciudad.

 

Así lo aseguró ayer José Ramón García Antón, conseller de Obras Públicas, tras reunirse con el secretario de Estado de Infraestructuras, Víctor Morlán, y el alcalde de Alicante, Luis Díaz Alperi. Nombraron a Miguel Garulo Gómez, técnico de urbanismo, nuevo gerente de la Sociedad Avant, responsable de toda esta obra.

 

Mil viviendas en total

 

Por su parte, la Plataforma Renfe (entidad ciudadana) arrancó ayer al Gobierno el compromiso de construir, como mínimo, un 25% de viviendas de protección oficial dentro de los cerca de 1.000 pisos que se edificarán en los terrenos liberados gracias al soterramiento de las vías del tren, principalmente en los barrios de Ciudad de Asís y La Florida, que congregan a más de 20.000 vecinos.

 

 

Las alegaciones presentadas por la Plataforma Renfe buscan dar continuidad a los terrenos liberados con amplias zonas verdes y áreas deportivas, y que el proyecto de construcción de un colegio se traslade a otra zona. Las zonas verdes ocupan ahora 89.154 m2.