El texto volverá ahora al Congreso, donde debe ser aprobado por mayoría absoluta. El pleno del Senado aprobó ayer el veto parcial de Convergència i Unió (CiU) a la sección de Vivienda de los Presupuestos Generales del Estado de 2008, por lo que las cuentas volverán al Congreso sin que la Cámara Alta haya podido introducir cambios al proyecto de ley. El veto presentado por los convergentes contó con el apoyo de cinco grupos parlamentarios (122 senadores del Partido Popular, seis de CiU, cuatro de ERC, cuatro de CC y uno de EA), lo que sumó un total de 137 votos a favor frente a 117 votos en contra. Ésta es la segunda vez en la historia de la democracia en la que el pleno del Senado aprueba un veto a los Presupuestos.

El proyecto de ley volverá ahora al Congreso, cuyo pleno necesita la mayoría absoluta para tumbar el veto aprobado ayer y que se puedan aprobar así definitivamente las cuentas; pero en ningún caso se podrán introducir enmiendas nuevas.