El presidente de la Generalitat, Carles Puigdemont, ha renunciado a convocar elecciones autonómicas en Cataluña este jueves por la tarde porque no ha conseguido del Gobierno central "garantías para convocarlas con normalidad", ha afirmado en alusión a que el Gobierno aplicará el artículo 155 de la Constitución a la región.

Puigdemont ha asegurado que ha querido agotar "todas las vías para una solución dialogada" para un conflicto político: "He estado dispuesto a convocar estas elecciones" con garantías para que se hagan con normalidad, pero "ha sido imposible", y ha añadido que no puede aceptar las medidas anunciadas por el Gobierno central.

Tras un día en el que incluso durante horas se ha hablado de la posible convocatoria de unas elecciones autonómicas para el día 20 de diciembre, el president ha reconocido haber "estado dispuesto a convocar elecciones" en Cataluña antes de que "expire mi mandato para convocarlas".

Acto seguido, Puigdemont ha asegurado que "no existen las garantías suficientes que justifiquen convocar elecciones" y en un tono de enfado ha anunciado que "no acepto las medidas que pretende aprobar el Estado" una medidas que ha calificado de "vengativas".

En consecuencia, el president ha decidido que "la mayoría (del Parlament) determine" cómo reaccionar ante la aplicación del artículo 155 de la Constitución.

Mientras, el pleno monográfico del parlamento catalán para responder a la aplicación del artículo 155 de la Constitución, cuyas medidas prevén aprobarse el viernes en el Senado, se ha retrasado hasta las 18:00 horas.

Si este mediodía el presidente de la Generalitat, Carles Puigdemont, apostaba por convocar elecciones en Cataluña e incluso se barajaba la fecha del 20 de diciembre como la más probable, ahora todo ha quedado en suspenso hasta esta tarde.

Según informan desde el Govern, Puigdemont realizará la declaración institucional en el Palau de la Generalitat pero se desconoce la hora y el asunto.

Carles Puigdemont piensa en cambiar su primera decisión de convocar elecciones tras conocerse que el Partido Popular ha defendido que el Senado siga adelante con la tramitación de las medidas para Cataluña en aplicación del artículo 155 de la Constitución, aunque ha asumido que el Gobierno puede graduarlas en función de la evolución de los acontecimientos.

Con esta decisión el presidente de la Generalitat ha dado un nuevo giro en sus planes.

El lehendakari Íñigo Urkullu ha actuado como mediador para que el president de la Generalitat, Carles Puigdemont, planteara una convocatoria de elecciones autonómicas en Cataluña, que evitara la aplicación del artículo 155 de la constitución.

Según han confirmado a Europa Press fuentes conocedoras de este proceso, el presidente vasco ha mantenido conversaciones con este objetivo en los últimos días y que se intensificaron a última hora de este miércoles.

En el proceso de mediación también habría participado un grupo de empresarios catalanes, entre ellos Juan José López Burniol, Marian Puig, Emilio Cuatrecasas y Joaquim Coello, en representación de un grupo más amplio de instituciones y representantes de la sociedad civil.

Destacados miembros del PSC como su líder, Miquel Iceta; el expresidente socialista José Montilla y la 'número dos' del partido y alcaldesa de L'Hospitalet de Llobregat (Barcelona), Núria Marín, están mediando entre los gobiernos central y catalán para evitar una declaración unilateral de independencia.

Según han explicado a Europa Press fuentes cercanas, en los últimos días han intensificado sus contactos para mediar y evitar tanto una declaración unilateral de independencia como el artículo 155 de la Constitución.

Iceta ha mantenido contacto directo con Puigdemont en los últimos días --trascendió una reunión el pasado viernes-- y ha sido un "puente esencial" con el Gobierno central y el PSOE, partidario de convocar elecciones y de no activar el 155.

Puigdemont también se reunió el miércoles en la Generalitat con Montilla, que le pidió que evitara el 155 con unas elecciones como mejor salida a la situación actual.

Anunciada la intención de Puigdemont de convocar elecciones, los socialistas están centrados en evitar la intervención del autogobierno catalán mediante el artículo 155, que se votará definitivamente en el Senado este viernes.

Recordar que tras la maratoniana cumbre de anoche en el Palau de la Generalitat, que se alargó hasta las dos de la madrugada, esta mañana Puigdemont ha vuelto a reunir a sus consellers a las 10.00, en un encuentro al que se han ido sumando los 61 diputados de JxSí.

Las direcciones de los partidos independentista PDeCAT y ERC han convocado de urgencia a sus cargos directivos para analizar la decisión de convocar elecciones anunciada por Puigdemont. Y es que la decisión del president han sentado como un jarro de agua en el bloque independentista. Ya se han producido las primeras dimisiones en el PDeCAT y estas presiones internas por parte del PDeCAT, de ERC, de la CUP y de las entidades independentistas podrían hacer cambiar de opinión al president Puigdemont.