El consejero de Economía y Conocimiento de la Junta de Andalucía, Antonio Ramírez de Arellano, ha destacado que el Parque Tecnológico de Andalucía (PTA) ha facturado en sus 25 años de vida más de 20.000 millones de euros, al tiempo que ha generado 70.000 puestos de trabajo.

Arellano ha participado en una mesa redonda del curso de verano de la Universidad de Málaga (UMA) '25 años del PTA ¿y los próximos 25?' junto al delegado del Gobierno andaluz en Málaga y presidente del PTA, José Luis Ruiz Espejo; el rector de la UMA, José Ángel Narváez; el alcalde de Málaga, Francisco de la Torre; y el presidente de la Diputación, Elías Bendodo.

En ella, los representantes de las instituciones han abordado el papel de las administraciones en la tecnópolis malagueña y han reflexionado sobre los cambios de paradigma en la economía, la sociedad, la educación y la información.

Durante su intervención, Arellano ha resaltado que los parques tecnológicos de la comunidad autónoma "facturan el 25 por ciento de todos los parques tecnológicos de España", por lo que son "experiencias que han funcionado correctamente". En el caso del PTA, ha resaltado que esta tecnópolis aloja actualmente a más de 600 empresas y más de 17.700 trabajadores.

Del mismo modo, el consejero ha incidido en "pensar en los cambios de paradigma en los que estamos", subrayando que la economía "está cada vez más presidida por la digitalización, por el 'big data', por el mercado globalizado y por un entorno donde la innovación tiene un papel cada vez más importante".

Según ha argumentado, el reto de las instituciones es "facilitar unas perspectivas de certidumbre, una solvencia en el sistema y un funcionamiento de las infraestructuras y del capital humano"; todo ello en un contexto "cada vez más competitivo y globalizado".

En el caso de la Junta, ha invitado a reflexionar sobre "las responsabilidades que le tocan, muy vinculadas a una propulsión territorial equilibrada". Asimismo, ha indicado que el principal reto consiste en "conseguir que los currículums y la formación responda a un cambio de paradigma en el modelo universitario", que "ha pasado de ser orientada a formar las clases dirigentes de los empelados públicos" a "un servicio público que las personas ven como un mecanismo para hacer otro tipo de proyectos".

Por su parte, Narváez ha incidido en el papel de la universidad "para que los estudiantes sean capaces de desarrollar una carrera profesional adecuada y sean capaces de trabajar en lo que han estudiado", dando además "un servicio a la sociedad, que además está en un profundo cambio".

Asimismo, el rector de la UMA ha incidido en "poner en mayor valor el conocimiento", como una "herramienta de transformación y como un valor intangible para el desarrollo y el progreso".

Al tiempo, ha desatacado la colaboración entre la institución universitaria y el PTA "no solo para generar profesionales con mejores currículums, sino para fortalecer el sistema económico, productivo y hacer que tengamos más y mejores empresas".

En palabras del alcalde malagueño, las instituciones públicas "sí estamos preparadas de cara al futuro pero no lo suficiente", agregando que "hay que hacer muchos más esfuerzos para tener unas administraciones ágiles, más transparentes, más participativas, más preocupadas por la educación y por la innovación".

Al respecto, ha incidido en los esfuerzos para hacer los gobiernos "más descentralizados y con más capacidad de competencias desde el ámbito local" para, de este modo, "tener una administración cercana y flexible a la dinámica de los temas, que es muy cambiante y veloz en cuestiones de innovación".