Emprendedores, centros de investigación y grandes multinacionales. El Parque Tecnológico de Andalucía (PTA), ubicado en Málaga, acoge a profesionales de todos los tamaños para apoyar sus proyectos en I+D a través de formación, instalaciones, herramientas tecnológicas, soporte a la internacionalización y un servicio de difusión e intercambio científico.

La electrónica, información, informática y las telecomunicaciones son los sectores de mayor peso del recinto y representan el 53% de la facturación total, que asciende a 1.758 millones de euros, según datos de PTA correspondientes a 2016.

"Las empresas que se instalan en el parque deben de tener un marcado carácter innovador, bien en sus productos, procesos o en los servicios que desarrollen o las tecnologías que utilicen", explica José Luis Ruiz Espejo, presidente del Parque Tecnológico y delegado en Málaga.

Hace 25 años, el centro andaluz nació con la aspiración de convertirse en el Silicon Valley español. Hoy cuenta con 17.776 trabajadores (1.530 en I+D) y 635 empresas y ha extendido una red de innovación en toda la ciudad. "El PTA se ha convertido en uno de los pilares que ha contribuido a que Málaga sea capital económica de Andalucía al suponer en torno al 7% del Producto Interior Bruto de Málaga, y hasta el 1,71% del de Andalucía", afirma Ruiz Espejo.

Uno de los puntos fuertes del parque es su capacidad para atraer inversión privada, por lo que no depende tanto del estado de las arcas públicas, muy dañadas durante la crisis económica.

La inversión realizada para la construcción y puesta en marcha de los edificios y los aparatos tecnológicos alcanza los 807 millones de euros, de los que 628 millones provienen de la iniciativa empresarial privada (79,5%) y 179 millones de las instituciones públicas (20,5%).

"Nuestra misión es doble: generar y atraer talento. Málaga es un foco de talento joven, innovador, y debemos aprovecharlo para nuestras empresas y también para exportarlo", destaca el presidente del PTA.

El emprendimiento es uno de los focos principales que quiere impulsar el parque. Actualmente, acoge el Centro Andaluz de Emprendimiento (CADE) y seis incubadoras y preincubadoras para que profesionales de distintas materias puedan convertir en realidad sus ideas y planes de negocio.

"Hoy una de nuestras metas es dar estabilidad y salida a los emprendedores locales en sus proyectos empresariales y animarles a que emprendan la internacionalización -sostiene Ruiz Espejo-. Debemos ser capaces de atraer a las mejores empresas y los mejores proyectos, para que generen empleo, riqueza y desarrollo".

A pesar de que el Parque Tecnológico cuenta con una red de transporte que proporciona un buen acceso al resto del país -comunicaciones viarias, aeropuerto y AVE-, tiene un problema de movilidad para los propios trabajadores al ser uno de los ejes con más atascos de la ciudad. Se han puesto en marcha varios planes para solucionar los colapsos circulatorios y se espera ampliar la carretera con un carril bus.