Los 23 vecinos de un edificio de Manresa (Barcelona) fueron desalojados ayer miércoles al surgir grietas en su edificio por un derribo en una calle adyacente.
Los vecinos no regresarán a sus casas hasta que las obras estén concluidas, según han informado los Bomberos de la Generalitat .
El desalojo fue pactado por los Bomberos de la Generalitat, Protección Civil y el arquitecto municipal después de que éste estudiara las grietas.
La estructura del edificio situado en el número 4 de la calle Flor de Maig no peligra.
Las obras de derribo se están llevando a cabo en la calle Puigterra de Dalt.
Los vecinos del edificio, que tiene cuatro plantas, pasaron la noche en casa de familiares y en el Hotel Pere III de la capital del Bages.
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