La duquesa de Palma acudía esta mañana a llevar a sus hijos al colegio y fue interceptada por los reporteros de televisión que hacían guardia para conocer su opinión sobre la separación de los Duques de Lugo.

Doña Cristina, felizmente casada con Iñaki Urdangarín y madre de cuatro hijos, hizo para los periodistas la siguiente reflexión:"Son cosas que pasan en los matrimonios".

Los duques de Lugo, la infanta Elena y Jaime de Marichalar, han convenido el cese temporal de su convivencia matrimonial, informaban ayer a Efe fuentes del Palacio de la Zarzuela. Un portavoz de la casa de la Casa del Rey quiso aclarar que "eso no significa que la separación sea definitiva".

De momento, la separación no tendrá consecuencias legales, según informa el diario La Vanguardia en su edición digital. Por lo tanto, mientras dure la situación actual Jaime de Marichalar podrá seguir utilizando el título de duque de Lugo en su condición de consorte.

Tras 13 años de matrimonio, la infanta Elena y su esposo, Jaime de Marichalar, quieren, al parecer, se encuentra muy afectado, quieren darse un tiempo para meditar sobre su futuro matrimonial, "pensando siempre en el bienestar de sus hijos", Felipe y Victoria de Marichalar, de 9 y 7 años, y en su condición de miembros de la Familia Real.

La infanta Elena se ha trasladado al antiguo domicilio de la pareja a escasos metros de la que ha sido hasta ahora su residencia conyugal en Madrid.

Recientemente, cuando aún se desconocían los graves problemas del matrimonio, Doña Elena pudo ser vista comprando en Ikea.

La Infanta Elena, esta mañana, a la misma hora que su hermana, llevaba a Froilán y Victoria Federica al colegio donde estudian en Madrid. Se la pudo ver sonriente y relajada, pese al gran número de fotógrafos que hacían guardia a la puerta del colegio.