El PP ha pedido que el presidente del Gobierno, José Luis Rodríguez Zapatero, comparezca ante el pleno del Congreso para explicar su "pasividad" en el rescate de las azafatas que estaban detenidas en Chad. Además, quiere que el Ejecutivo se ponga "manos a la obra" para liberar cuanto antes a los tres españoles que permanecen aún en aquel país.

Así lo ha asegurado el secretario general del PP, Ángel Acebes, quien expresó su felicitación y "sincero agradecimiento" al presidente francés, Nicolas Sarkozy, por su "éxito" en la liberación de las azafatas.

El 'número dos' del PP subrayó que si no hubiera sido por Sarkozy las españolas aún estarían en Chad. "Menos mal que estaba Sarkozy", proclamó, tras asegurar que mientras tanto el jefe de la diplomacia española, Miguel Ángel Moratinos, estaba "de puente".

Planteamiento "miserable" del PP

Por su parte, el secretario de organización del PSOE, José Blanco, ha tildado de "lamentable" que el PP trate de sacar "alguna rentabilidad política" de la liberación de las azafatas españolas y que lo haga desde planteamientos "miserables" y "faltando a la verdad".

Blanco opinó que al PP lo que le "molesta" es la "buena relación" y el "entendimiento" existente entre los gobiernos de España y Francia.

Fernández Bermejo: "España actuó de manera inteligente"

En relación con este tema, el ministro de Justicia, Mariano Fernández Bermejo, ha manifestado que España actuó de manera "especialmente inteligente" y achacó la liberación a la "magnífica" relación diplomática con Francia.

Aznar: "Me siento humillado como español"

El ex jefe del Gobierno José María Aznar ha agradecido a su "amigo", Nicolas Sarkozy, las gestiones para liberación, aunque, no obstante, ha asegurado que como ciudadano español su sentimiento es de "humillación". "¿Se imagina que un presidente del Gobierno español rescate a una tripulación francesa y la deje en París?", añadió, en unas declaraciones a la Cadena Cope.

ERC: "La diplomacia española tiene un papel de mera comparsa"

Por otro lado, el portavoz de ERC en el Parlament, Joan Ridao, ha criticado que en las gestiones "la diplomacia española adopte un papel de mera comparsa" y "testimonial". También indicó que "desea que el episodio tenga un desenlace rápido y feliz".