Miguel Carcaño, único condenado por el asesinato en 2009 de la joven sevillana Marta del Castillo, señaló directamente durante la primera reconstrucción de los hechos a sus amigos Samuel y Javier García, El Cuco, como las personas que sacaron el cuerpo del domicilio de León XIII y lo metieron en un coche. Tras este testimonio ante el juez instructor, que tuvo lugar en dicho domicilio, El Cuco fue llevado al mismo lugar.

Es lo que este martes se ha podido ver en una nueva entrega del vídeo de la reconstrucción de los hechos, ofrecida por el programa Espejo Público. Esta declaración tuvo lugar el 17 febrero 2009. En ella, Carcaño confesó haber asesinado a Marta, pero aseguró que después del crimen llamó a sus amigos y "ellos la metieron dentro del coche" mientras él permanecía fuera de la vivienda. Lo hicieron, dijo, sin cubrirla con mantas "ni nada".

En el vídeo se escucha al condenado explicar lo que ocurrió después de que golpeara a la joven con un cenicero en la cabeza. "Empecé a hablar con ella, no me respondía, me puse nervioso", explicó, añadiendo que la golpeó "sin fuerza", que se manchó con la sangre y que salió a llamar por teléfono a una cabina pública con dinero que la propia Marta del Castillo había dejado sobre la mesa del salón.

"Me salí, me senté, me puse a llorar y le seguí hablando", afirmó Carcaño ante el juez, una vez que comprobó, según su testimonio, que el corazón de la víctima no latía. Después de prestar ese testimonio, El Cuco, entonces menor, al que Carcaño había involucrado, fue llevado al mismo domicilio en presencia del juez para que ofreciera su versión de los hechos. El programa emitirá el vídeo de esa reconstrucción el miércoles.

Miguel Carcaño fue condenado a 21 años y tres meses de prisión. En todos estos años ha cambiado varias veces de versión en su descripción de los hechos, antes y después de haber sido condenado. El Cuco fue condenado a tres años de internamiento en un centro de menores por encubridor.