La voluntad de todas las partes es compatibilizar la protección de las aves con la adecuada conservación del patrimonio cultural, según un comunicado de la Conselleria de este viernes.
La Conselleria ha decidido crear una comisión de seguimiento formada por técnicos de la Secretaría de Medio ambiente y del departamento de Cultura, además de representantes del Obispado.
La retirada de nidos de la fachada se tendrá que hacer antes del 6 de febrero de 2017, momento en el que empieza el periodo de cría, los trabajos no podrán interferir en las nidificaciones que se desarrollen en los contrafuertes del edificio y el nido del campanario, que tiene riesgo de caerse, tiene que ser retirado lo antes posible.
Según la Conselleria de Territorio, en la catedral viven unas 40 cigüeñas adultas, y unos 40 polluelos cuando están en reproducción.
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