Juli Simón: "El público del Salón Erótico de Barcelona es un fiel reflejo de nuestra sociedad"

Asistentes al Salón Erótico de Barcelona.
Asistentes al Salón Erótico de Barcelona.
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Asistentes al Salón Erótico de Barcelona.

Más de 20.000 personas visitaron el Salón Erótico de Barcelona (SEB) el año pasado, 3.000 más que en 2014. Este certamen, el más importante del Estado, incluyó 1.900 espectáculos en vivo y estrenó nueva sede en el Pavelló de la Vall d'Hebron. El próximo jueves abre puertas en el mismo enclave una nueva edición del salón que también incluye hasta el próximo domingo talleres, exposiciones y desfiles y espacios temáticos, como los dedicados al sexo tántrico o al Foot Fetish o fetichismo de los pies. Esta ha venido precedida por un polémico anuncio que se ha hecho viral en las redes sociales. 20minutos.es habla con Juli Simón, director del certamen, a un día de su apertura.

¿Qué presupuesto aproximado mueve el sector del ocio para adultos en España? ¿Y el salón erótico? ¿Ha subido en los últimos años?

Unos 900 millones de euros, entendiendo como ocio para adultos cine X, webcamers, juguetes eróticos y espectáculos diversos. Sí que ha subido sobre todo la compra de juguetes eróticos como complemento y mejora de la sexualidad.

¿Cuál es el perfil de visitante del salón? ¿En qué ha cambiado la oferta del certamen en las diferentes ediciones?

Es difícil e injusto hacer un perfil único, pues el salón incluye en su oferta todos los géneros sexuales. Por lo tanto, vienen personas heterosexuales, bisexuales, homosexuales, liberales, fetichistas, sadomasoquistas, etcétera. Vienen personas de todas las edades y tendencias sexuales. Somos un fiel reflejo de nuestra sociedad. La oferta ha cambiado en paralelo a la evolución del consumidor. Quién manda es el consumidor. Hemos pasado de una persona que consumía porno en video a otra que lo consume por internet a través del teléfono, la tablet o el ordenador. Las nuevas tecnologías se imponen, lo que condiciona las producciones y la forma de distribución. Además, el consumidor de juguetes eróticos ha evolucionado muy rápidamente. De no saber demasiado lo que compraba se ha hecho un comprador bien informado y exigente.

¿Somos un país abierto respecto a los de nuestro entorno en materia de festivales y certámenes eróticos?

Fuimos el primer acontecimiento erótico del mundo, después han surgido más en muchos países: Estados Unidos, Japón, Alemania, Reino Unido, Portugal, Brasil y México, entre otros. Algunos de estos certámenes los organizamos nosotros. Cada país tiene su propia cultura y leyes, pero sin duda, el salón más conocido por su libertad de contenidos es el de Barcelona. Este sigue siendo la referencia mundial.

¿La ubicación del festival en Barcelona continuará siendo la Vall d'Hebron?

Sí, nos encanta. Es idónea para nuestros contenidos y nos permite diferenciar los espacios.

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