La economía española registró un crecimiento trimestral del 0,8% entre enero y marzo de este año, la misma tasa que en el tercer y cuarto trimestre de 2015, según ha publicado el Instituto Nacional de Estadística (INE)., que confirma el avance comunicado el pasado 29 de abril. De este modo, la economía española encadena once trimestres al alza.

En términos inteanuales, la tasa de crecimiento del PIB fue del 3,4%, una décima inferior a la del trimestre anterior debido a la menor aportación de la demanda nacional al crecimiento agregado (3,8 puntos, tres décimas menos que de octubre a diciembre), que queda en parte compensada por una contribución menos negativa de la demanda externa (-0,4  puntos, frente a los -0,6 del trimestre anterior).

La tasa interanual suma de este modo nueve trimestres en positivo, aunque es la primera vez después de 13 trimestres que el PIB interanual decrece, lo que podría ser achacable a la menor fuerza en la intensidad de los vientos de cola (como el precio del petróleo, que casi se duplica desde comienzos de año) y a la incertidumbre por el bloqueo político en el país que, según los expertos, ha retraído algunas inversiones.

El empleo, sin embargo, sigue mostrando buena cara. En el primer trimestre, el empleo aumentó a un ritmo del 3,2% en términos interanuales, dos décimas más que en el trimestre anterior, lo que se traduce en la creación de 533.000 empleos equivalentes a tiempo completo en un año. En relación al último trimestre de 2015, el empleo creció en el primer trimestre de este año un 0,9%, tres décimas más.

En la demanda interna se han observado dos sentidos distintos en el primer trimestre del año de forma internanual: mientras el consumo de los hogares ha crecido un 3,7% (su mayor aumento desde 2006 y el noveno trimestre seguido al alza), el gasto público moderó su empuje al 2,6% frente al 3,7% del trimestre anterior.