Si hace dos semanas fue el Banco Santander el que anunciaba la salida de 1.200 empleados y poco después Ceiss elevaba los despidos en sus oficinas a 1.200 trabajadores, este viernes ha sido CaixaBank el que ha anunciado un plan de reducción de 484 empleos.

La salida de los trabajadores ha sido pactada con los sindicatos y se formalizará a través de un Plan de Desvinculaciones Voluntarias Incentivadas al que podrán acogerse los empleados nacidos con anterioridad al 1 de enero de 1959.

Según Caixabank —que a finales del año pasado empleaba a 32.242 personas— se pagará el 75% de la retribución fija bruta anual a las personas que opten a este plan de bajas, una cantidad que  se revalorizará anualmente en el mismo porcentaje de incremento salarial que se fije en el Convenio de aplicación para el salario base con el máximo del 1% anual.

Los interesados a aocgerse al plan podrán adherirse desde este lunes 18 de abril hasta el día 25. "Se atenderán las solicitudes priorizando en función de las fechas de nacimiento y las salidas están previstas que se produzcan el día 1 de junio de 2016", explica la entidad financiera en un comunicado.