La Confederación Hidrográfica del Ebro ha procedido este jueves a la plantación de 300 ejemplares de olmo que servirán para recuperar una zona de la ribera afectada por las crecidas de 2015 en terreno público en el río Guadalope, en el término municipal de Alcañiz y que fueron donados por el Ministerio de Agricultura, Alimentación y Medio Ambiente (MAGRAMA) a través de su Dirección General de Desarrollo Rural y Política Forestal.

En el acto han participado, el alcalde de la localidad, Juan Carlos Gracia y representantes técnicos de la CHE, encabezados por su jefe de Servicio de Estudios Medioambientales, Alfonso Calvo y del MAGRAMA.

Estos ejemplares proceden del Programa Nacional de Mejora y Conservación de los Recursos Genéticos de los Olmos Ibéricos, fruto de la colaboración durante 30 años del Ministerio y la Universidad Politécnica de Madrid y presentan como particularidad su resistencia a la grafiosis. Esta enfermedad fúngica, trasmitida por un insecto, ha causado la muerte de millones de árboles en toda Europa, llegándose incluso en algunas zonas a la desaparición de la especie.

Por ello, esta característica de resistencia permitirá una importante mejora ambiental y de protección en la zona afectada. Los árboles se recogieron en el Centro Nacional de Recursos Genéticos Forestales de Puerta de Hierro (Madrid) la Dirección General de Desarrollo Rural y Política Forestal del MAGRAMA y se procederá a su plantación el próximo 18 de febrero en un acto conjunto con el Ayuntamiento de Alcañiz.

La cesión fue solicitada por el organismo de cuenca como complemento ambiental de la actuación de emergencia que se ha ejecutado en este cauce por las crecidas del primer trimestre de 2015 y se ha planteado a modo de protección de la margen, mejora paisajística y de la biodiversidad del ecosistema de ribera.

La CHE está terminado las obras de emergencia en todos los cauces afectados por las avenidas del pasado año, por un valor en todas las subcuencas afectadas de 30 millones de euros. En Aragón se están ya finalizando los trabajos que han alcanzado más de 830 actuaciones tanto en el Eje del Ebro, como en las zonas afectadas en los afluentes de la margen derecha.