La presidenta de la Diputación de Pontevedra, Carmela Silva, ha reiterado este jueves sus críticas a la decisión "unilateral" del "Gobierno en funciones", de prorrogar la presencia de la celulosa ENCE en la ría de Pontevedra durante 60 años, y ha advertido de que se trata de una "imposición" a una gran mayoría de ciudadanos que apoyan "otro modelo".

Así lo ha señalado Silva durante el coloquio posterior a su intervención en un acto organizado por Nueva Economía Forum, en el que ha recordado que "el pueblo es quien más ordena", y que los pontevedreses dieron su apoyo mayoritario al actual regidor, Miguel Anxo Fernández Lores, quien "se presentó a las elecciones planteando que ENCE tenía que irse fuera".

Silva ha apuntado que el PSdeG también defendió la marcha de ENCE y la búsqueda de una ubicación alternativa, una búsqueda en la que tendrían que haber trabajado la Xunta y el Gobierno central, en lugar de haberse quedado "de brazos cruzados".

"No es aceptable imponer algo a una mayoría aplastante de pontevedreses. ¿Por qué no darle a Pontevedra la oportunidad de cambiar su modelo económico?", ha planteado Silva, quien ha recordado que, hace un año, "el PP también se oponía" a la continuidad de ENCE. "Hace un año el señor Jacobo Moreira pedía al alcalde que liderase la salida de ENCE. Un poco de seriedad", ha sentenciado.