Las zonas con más contaminación de la capital se sitúan en los distritos de Centro, Retiro y Carabanchel. Así lo indican los valores registrados hasta el pasado 30 de noviembre en las 24 estaciones de medición de la calidad del aire del Ayuntamiento de Madrid. Según estos datos, las estaciones de Fernandez Ladreda (Carabanchel) y Escuelas Aguirre (Retiro) registraron los mayores niveles de dióxido de nitrógeno (NO2) de la capital, con una media de 56 microgramos/m3. Por detrás, aparecen dos estaciones del distrito Centro: Plaza de España y Plaza del Carmen, con 49 y 48 microgramos/m3 de media, respectivamente, hasta finales de noviembre.

También presentan niveles por encima del valor medio anual permitido (40 mcg/m3) otras ocho estaciones: Plaza Castilla (45), Ramón y Cajal (44), Urbanización Embajada (44), Ensanche de Vallecas (42), Villaverde (42), Cuatro Caminos (42), Barrio del Pilar (42) y Arturo Soria (41). Las estaciones con los niveles medios más bajos son El Pardo (17), Casa de Campo (22) y Juan Carlos I (22).

Los elevados niveles de contaminación de estos últimos días provocaron este jueves la prohibición de aparcamiento para los no residentes en la almendra central de Madrid. Esto ha supuesto que un 80% de las plazas de la zona azul del Servicio de Estacionamiento Regulado (SER) se quedasen vacías, además de reducirse la circulación en un 3% en los accesos a la capital.

Son datos que ha ofrecido la directora general de Sostenibilidad del Ayuntamiento de Madrid, Paz Valiente, que ha comparecido para ofrecer información junto al director general de Gestión y Vigilancia del Tráfico, Paco López, y la alcaldesa en funciones, Marta Higueras, que sustituye a Manuela Carmena, de viaje en la Cumbre del Clima de París. En el segundo día de restricción del aparcamiento en Madrid (la medida se aplicó también el pasado 13 de noviembre), la velocidad media en los accesos a Madrid fue inferior a los 70 kilómetros por hora frente a los 84 de media habitual, y se percibió una mayor fluidez en el tráfico además de un aumento del 1,63% en el número de viajeros en los autobuses públicos.

Madrid lleva ya tres días con el protocolo anticontaminación activado, aunque la jornada de este jueves fue la primera en que se entró en el escenario 2, que incluye la restricción al aparcamiento. «Las previsiones son malas, seguimos teniendo el anticiclón que produce la contaminación», advirtió la alcaldesa en funciones, que, no obstante, aclaró que, según el protocolo, este viernes es imposible subir en el escalafón de restricciones hasta la limitación del acceso al centro a una parte de los coches.

Para que eso suceda deben superarse durante tres días seguidos los límites de 250 microgramos de dióxido de nitrógeno por metro cúbico, con lo que hasta el domingo Madrid no podría entrar en ese escenario, según dijo Marta Higueras. De tenerse que aplicar esa restricción en la entrada al centro a los vehículos con matrículas pares o impares (dependiendo de en qué día caiga la restricción), estarían preparados los refuerzos de Metro, Cercanías y autobuses para que los madrileños puedan desplazarse al centro, que en estas fechas está más concurrido de lo habitual por las compras navideñas y el puente de la Constitución.