El juez de la Audiencia Nacional Fernando Andreu ha elevado la fianza del "caso Bankia" hasta los 38,2 millones de euros al haberle sumado otros 4,7 millones, cantidad que ha requerido al grupo financiero y a su cúpula, entre ellos su expresidente Rodrigo Rato, para que la abonen en diez días.

En un auto, el magistrado ha accedido así a las peticiones que hicieron varios accionistas personados en la causa durante la vista celebrada el pasado 18 de noviembre.

Las inversiones exigidas por estos perjudicados ascendían, en concreto, a 3.548.447 euros, aunque al aplicarles el tercio legal que prevé la ley la cifra es de un total de 4.767.262 euros. Con ello, la medida cautelar, que hasta este lunes estaba cuantificada en 33,5 millones, se sitúa en 38,2 millones de euros.

Para justificar su decisión, el juez recoge el criterio de su instancia superior, la Sala de lo Penal, que aunque redujo la fianza de 800 millones que inicialmente fijó el instructor, avaló la imposición de esta medida cautelar ciñéndola a lo que reclamaran los accionistas que forman parte del procedimiento.

La Sala ya advirtió en ese momento que la cifra podía variar, teniendo en cuenta la posibilidad de que siguieran sumándose afectados, como así ha sido.

En su auto, que es recurrible, el juez Andreu da un plazo de diez días a los imputados -BFA, Bankia, Rato y los exconsejeros José Manuel Fernández Norniella, Francisco Verdú y José Luis Olivas-, para hacer efectiva esta nueva suma bajo el apercibimiento de que, en caso contrario, procederá al embargo de sus bienes hasta satisfacerla.

La primera fianza ya estaba garantizada desde el pasado mes de junio, cuando los imputados hicieron frente a los casi 6 millones que correspondían a cada uno. Pero mientras BFA-Bankia optó por transferir al juzgado 11,2 millones, los que fueran sus máximos responsables recurrieron a las compañías aseguradoras que cubrieron la salida a bolsa, Liberty International Underwriters (LIU) y Torus, que consignaron los 22,7 millones restantes.