Familiares del niño de cuatro años que fue mordido por un perro cuando jugaba en un parque infantil de Navia, en Vigo, han formalizado la denuncia por estos hechos, a la que se suma una segunda denuncia de otra persona, que fue testigo de la agresión, cuyo cachorro había sido mordido con anterioridad por el mismo perro.

Los hechos denunciados se remontan a las 20,15 horas del lunes cuando, según ha informado a Europa Press la Policía Nacional, la Sala Operativa del 091 recibió la llamada de una mujer que alertaba de que un perro acababa de morder a su hijo en un parque de la zona de Teixugueiras.

Una patrulla acudió al lugar y solicitó la presencia del 061 para que atendiese al menor, que sangraba abundantemente. Fuentes de Urxencias Sanitarias han comunicado a Europa Press que se desplazó una ambulancia asistencial, que atendió al niño en el punto y, posteriormente le trasladó al Hospital Xeral.

Entre tanto, los agentes recabaron datos de la madre del niño así como de testigos de la zona, que mencionaron que el dueño lo suele llevar suelto. Además, uno de los testigos hizo referencia a que, en días anteriores, el perro ya había protagonizado un incidente cuando mordió a su cachorro.

Asimismo, los efectivos policiales comprobaron que el propietario del can se encontraba en las proximidades, por lo que también procedieron a identificarle. El hombre, cuya mascota en ese momento iba sujeto con un cinturón, alegó que el animal se le había escapado en un momento dado.

DILIGENCIAS

La Policía Nacional ha manifestado a Europa Press que el perro, que tenía chip, es un 'Border Collie', una raza que no se considera potencialmente peligrosa y que no está sujeta a llevar bozal.

No obstante, supuestamente sí tendría que llevar correa, de acuerdo con la normativa del Ayuntamiento de Vigo, que mantiene que, con carácter general, los animales deberán ir sujetos con correa en las vías públicas. Una cuestión que, en base a los testigos, parece que no se cumplía.

Al haber lesionados, la patrulla actuante del Cuerpo Nacional de Policía redactó un atestado, que remitió al Juzgado de Instrucción número dos de Vigo para que dilucide si lo ocurrido implica algún tipo de responsabilidad penal, civil, o ambos para el propietario del animal.

La Policía Local de Vigo, que también acudió al lugar tras los hechos en apoyo a la patrulla de la Policía Nacional, instruyó diligencias, que remitió a la Unidad de Medioambiente de cara a la posible apertura de una investigación.

Tras ello, este martes el padre del niño presentó la denuncia y, con posterioridad, ese mismo día presentó una segunda denuncia el testigo dueño del cachorro, que puso en conocimiento los hechos ocurridos con su animal y reclamó los daños a su perro.