La central sindical CCOO denunció la "hipocresía" y falta de actuación del Gobierno y del Parlamento, que siguen sin actuar ni regular la prostitución como actividad laboral, lo que obliga a las prostitutas a seguir ejerciendo este trabajo sin protección de ningún tipo ni garantías laborales.

La secretaria confederal de la Mujer de CCOO, Carmen Bravo, hizo hoy esta denuncia en una rueda de prensa en la que presentó el libro Derechos de ciudadanía para trabajadoras y trabajadores del sexo, elaborado por las profesoras de la Universitat de València Magdalena López y Ruth Mestre.

Tras un año de trabajos en los que han participado todo tipo de asociaciones (de mujeres, prostitutas y ONG), la Comisión Mixta de Derechos de la Mujer ha publicado un informe de conclusiones "decepcionante y absolutamente criticable" que deja la prostitución "exactamente igual que antes", es decir, "sin prohibirla ni reconocerla o regularla", denunció Carmen Bravo.

El informe de esta Comisión Mixta, formada por senadores y diputados, propuso realizar "campañas de sensibilización" contra la prostitución y suprimir los anuncios de contacto que aparecen en la prensa pero descartó regularla por considerar que más del 90 por ciento de las mujeres que la practican son inmigrantes que lo hacen en contra de su voluntad.

20.000 mujeres en 3.000 clubes

Sin embargo, Magdalena López explicó que, según la Guardia Civil, en España hay 20.000 mujeres que ejercen la prostitución en 3.000 clubes de alterne y otras 6.000 que la ejercen en la calle, mientras que las estimaciones de las ONG dicen que hay entre 300.000 y 500.000 prostitutas.

Para Magdalena López, las cifras que manejan las organizaciones sociales no son ciertas, porque sólo pretenden "alarmar" y llamar la atención sobre este sector en el que, "en contra de lo que se afirma, la mayoría de las mujeres que ejercen la prostitución lo hacen libremente y son tanto españolas como inmigrantes".

Precisamente por eso, explicó, hay que regular esta actividad para que las españolas y mujeres con papeles puedan ejercer la prostitución con garantías laborales y "combatir las situaciones de explotación y vulnerabilidad" a las que están expuestas.

En cuanto a las que no tienen papeles, Ruth Mestre señaló que para ellas también en importante que la prostitución se reconozca como trabajo porque ello les permitiría regularizar su situación.