Las prisas no son buenas consejeras, y menos a la hora de conducir. Y es que pisar en exceso el acelerador puede acarrear, además de consecuencias dramáticas en forma de accidentes, cuantiosas multas económicas, e incluso la posibilidad de acabar en prisión si se exceden los límites de velocidad más de la cuenta.

Para tratar de disuadir a los conductores con prisas, Tráfico cuenta a día de hoy con 79 radares de velocidad fijos y móviles activos en las carreteras de la Comunitat Valenciana, según un informe elaborado por Automovilistas Europeos Asociaciados (AEA).

Para la realización de este listado, la entidad ha tomado una muestra a nivel nacional de 5.000 denuncias tramitadas en el último semestre, teniendo en consideración únicamente aquellos puntos donde en días diferentes se han formulado más de dos.

De esta forma, en comparación con el anterior mapa de radares elaborado en 2013, la Comunitat cuenta actualmente con 11 dispositivos más.

Por provincias, Alicante mantiene los 33 cinemómetros que tenía en 2013, Castellón pasa de 12 a 15 y Valencia sube de 25 a 33. La carretera que más radares suma de la Comunitat es la la N-332 con 17, seguida de  la A-7 con ocho dispositivos, la A-70 con siete y la AP-7 con seis.

Tráfico activa desde este miércoles hasta el 6 de abril la segunda fase de la operación especial de Semana Santa, en la que se prevén 7,9 millones de desplazamientos por las carreteras españolas. De ellos, aproximademente un 22% discurrirán por la Comunitat Valenciana. Más información en www.dgt.es y en el teléfono 011.

Los radares fijos y móviles de Tráfico cazaron el año pasado a 257.175 personas (704 al día) superando los límites de velocidad en la Comunitat Valenciana, un 55,3% más que en el año 2013, según datos de la Jefatura Provincial de Tráfico de Valencia. Las multas por estas infracciones pueden ir de desde los 100 euros las más leves hasta penas de 3 a 6 meses de prisión y la privación del derecho a conducir entre 1 y 4 años en el caso de las más graves.