La Fiscalía Anticorrupción de Barcelona y la Oficina Antifraude de Cataluña han reclamado al Ayuntamiento de Lleida las nóminas del alcalde, el socialista Àngel Ros, y de los concejales desde 2009, según ha explicado el propio primer edil a Europa Press este jueves.

"Pide las nóminas de muchos años, desde 2009, esta es la documentación que queda pendiente de entregar, las dietas van dentro de las nóminas", ha afirmado Ros, que ha asegurado que el departamento de informática de la Paeria trabaja para localizarlos y enviarlos próximamente.

Con esta información, los investigadores esperan averiguar si hubo una superposición de cobros como alcalde y diputado en el Parlament. Los investigadores también se llevaron los expedientes relativos a la concesión de la discoteca Larida a la empresa Adaix de Negocis, a la cual, según la ex teniente de alcalde Marta Camps, se dio un "trato de favor" al exonerarla a través de un decreto de alcaldía del pago de una deuda de unos 280.000 euros.

El alcalde ha hecho estas declaraciones un día después de que funcionarios de Anticorrupción y agentes de la Oficina Anticorrupción de Catalunya (OAC) entraran en el Ayuntamiento requiriendo expedientes de la concesión de la discoteca Larida y dietas. También clonaron el ordenador de Camps, quien había denunciado haber sido espiada.

Ros, que el miércoles ya defendió la legalidad de sus actuaciones, ha atribuido las denuncias a una reacción de la edil una vez que en el partido se conociera que no iría en la lista a las municipales, extremo que ella ha negado. El alcalde ha asegurado haber recibido el respaldo de la dirección actual de su partido y de la diputada Marina Geli: "He recibido muchos apoyos de la ejecutiva nacional y uno muy especial; Pasqual Maragall me llamó y me dijo: 'Àngel estoy contigo'".