La directora de Planificación Territorial y Urbanismo del departamento de Medio Ambiente y Política Territorial del Gobierno vasco, Elena Lete, ha defendido que Euskadi "no puede seguir colonizando más y más suelo", sino que es "necesario recuperar un espacio urbano e industrial ya agotado u obsoleto, y dedicarlo, con renovados conceptos sostenibles, tecnológicos y de futuro, a las necesidades de lo que van a ser las ciudades inteligentes".

Lete ha participado este jueves en la presentación de la plataforma de pymes vascas ConpyBasque en San Sebastián, una iniciativa que persigue "la materialización de soluciones integrales e innovadoras con las que instituciones y empresas puedan satisfacer y afrontar los retos más destacados que plantea el desarrollo urbano inteligente".

En el acto, la directora de Planificación Territorial del Gobierno vasco ha destacado que la gestión del Gobierno vasco procura "recuperar viejas infraestructuras y espacios industriales o residenciales y darles un nuevo uso, aumentando su ciclo de vida".

En este sentido, ha señalado que esa es la base de la revisión de las Directrices de Ordenación del Territorio y de la modificación de la Directriz de Cuantificación Residencial "que la semana que viene será aprobada provisionalmente".

Por otro lado, ha señalado que en lo que respecta al transporte de mercancías y viajeros las "ciudades inteligentes" deben buscar "un horizonte próximo de intermodalidad bien planificada, bien conectada, con demandas y ofertas de servicios inteligentes, atractivos y que ofrezcan una rotunda y sostenible alternativa a las saturadas, ruidosas y contaminantes calles y carreteras".

En este contexto, ha enmarcado el desarrollo de la nueva red ferroviaria del País Vasco. A su juicio, el transporte "bien planificado, respetuoso con el medio ambiente, constituye toda una expresión de sociedad avanzada y de ciudad inteligente".

Por otro lado, ha abogado por "el cuidado de nuestro rico patrimonio natural y la conservación del Medio Ambiente" y ha subrayado que "cada vez son más las empresas vascas acogidas a estándares europeos como el EMAS o similares ya que esas certificaciones abren puertas y mercados como garantía de trabajos bien hechos".