Al menos 16 civiles han muerto y más de cien han resultado heridos por bombardeos de artillería y disparos de misiles en las últimas 24 horas en Lugansk, una de las dos regiones rebeldes prorrusas del este de Ucrania, informaron los separatistas.

La ministra de Sanidad de la autoproclamada república popular de Lugansk, Larisa Airapetián, ofreció esas cifras este miércoles en una conferencia de prensa, según informan las agencias rusas.

"Según nuestros datos preliminares, en Stajanov murieron 13 personas, en Krasni Luch dos y una más en Lugansk" (la capital de la región), indicó.

Y agregó que en esas 24 horas se han registrado 114 heridos, que han sido trasladados a distintos hospitales, la mayoría de ellos en Stajánov y Lugansk.

"Sólo en el hospital regional ingresaron 71 heridos, de los cuáles 14 están en cuidados intensivos", indicó la ministra.

Los combates en el este de Ucrania se han recrudecido tras la ofensiva lanzada el pasado viernes por los separatistas prorrusos para conquistar localidades que aun están en manos de las fuerzas gubernamentales.

La ofensiva ha sido denunciada por el Gobierno de Kiev como una violación flagrante de los acuerdos de paz de Minsk, firmados en septiembre pasado.

El Gobierno ucraniano declaró este martes la alerta máxima en todo el territorio nacional y situación de emergencia en las regiones de Donetsk y Lugansk.

Kiev ha denunciado que al menos tres militares ucranianos han muerto y otros quince han resultado heridos en los combates con los separatistas prorrusos registrados en las últimas 24 horas en el este de Ucrania, según ha informado el portavoz de las Fuerzas Armadas, Vladislav Selezniov.

En una rueda de prensa, Selezniov ha dicho que los separatistas prorrusos han atacado 55 pueblos y localidades ucranianas en las últimas 24 horas.

Por su parte, los separatistas aseguraron este miércoles que las tropas ucranianas se repliegan con grandes bajas en la zona de Debáltsevo, en la región de Donetsk.