En octubre de 2011 Emma Holten se convirtió en víctima del 'porno vengativo'. La joven periodista danesa vio cómo fotos suyas con 17 y 19 años, desnuda y en casa de su exnovio, inundaron Internet. Ahora, con la ayuda de la fotógrafa Cecile Bodker, se desnuda como forma de protestar y diferenciar entre unas fotos en las que se le intenta deshumanizar y otras que simplemente son consentidas.

"Las imágenes buscan verme como un sujeto en lugar de como un objeto. No estoy avergonzada de mi cuerpo, pero es mío. El consentimiento es la clave", asegura en una entrevista en Elle. "Es activismo, porque la gente no ve la diferencia entre una fotografía compartida con o sin consentimiento", argumenta.

Holten se siente una "privilegiada" por encontrarse en un sistema que le permite esta defensa. "La vergüenza y el dolor es tan grande que te derrumbas cada día. Pero me di cuenta de que de muchas formas era una privilegiada por poder exponerme como una víctima, lo que normalmente es el problema. Normalmente no quieres llamar la atención sobre esas imágenes, así que no dices nada. Así que pensé que en lugar de eso debería actuar".

La periodista pide además a los usuarios que no sean partícipes de estas prácticas, pues entiende que lo hacen por disfrutar del erotismo no consentido. Y a las mujeres que son víctimas, les anima a alzar la voz. "Vives en una cultura patriarcal que trata de buscar una forma de ser tú", concluye.