El coordinador regional de Izquierda Unida, Daniel Martínez, ha anunciado una "fuerte ofensiva" contra el Almacén Temporal Centralizado (ATC) de residuos nucleares, que dará comienzo en las próximas semanas "desde la movilización y también desde las instituciones" y que incluye la presentación de mociones en todos los ayuntamientos de Castilla-La Mancha donde la federación de izquierdas cuenta con representación.

En nota de prensa en CUenca, Martínez ha indicado que de enero a marzo "será una buena fecha para movilizarse y dar la puntilla al proyecto", ya que, ha añadido que "ha quedado acreditado" que la decisión de instalarlo en Cuenca "fue una decisión política"

Martínez ha asegurado que, con el paso del tiempo, ha quedado acreditado que la decisión de instalar en Castilla-La Mancha el "basurero nuclear fue una decisión política de Cospedal".

En una rueda de prensa celebrada en Cuenca, en la que ha presentado una campaña "desde la movilización y desde las instituciones" contra la instalación del Almacén Temporal Centralizado en la localidad conquense de Villar de Cañas, Martínez ha denunciado que la presidenta regional habría tomado dicha decisión "para quitarle un conflicto político al señor Rajoy", ya que, ha apuntado, "nadie quería el basurero nuclear y se lo trajo a Castilla-La Mancha".

El responsable regional de IU ha insistido en que después "ha habido mucho esfuerzo por vender como algo positivo para Cuenca y Castilla-La Mancha este basurero nuclear, pero no lo es", por lo que, ha confesado, en el seno de su formación están "convencidos de que cada vez está más cerca el momento en que el Gobierno de Rajoy y, sobre todo, Cospedal, tenga que reconocer que no se puede construir en Villar de Cañas".

A ello apunta también, ha defendido, el que "las intenciones de almacenar los residuos radiactivos pasan cada vez más por almacenes individuales en las centrales nucleares", insistiendo en que el emplazamiento elegido "no es el adecuado" y en que las "dudas van creciendo".

Hasta el punto, ha dicho, de que algunas empresas subcontratadas han reconocido que "no existe seguridad ni plenas garantías de que se pueda construir el ATC sin consecuencias graves para la seguridad" de los vecinos de Cuenca e incluso Castilla-La Mancha, ha añadido.

"Estamos más cerca que nunca de conseguir que el ATC no venga a Cuenca", ha indicado, para asegurar que el proyecto "no va a llegar a Castilla-La Mancha y, cuanto antes se sepa, mejor".

Asimismo, Martínez ha alertado de que algunas obras que ya se han adjudicado en torno al ATC llevan aparejada una cláusula según la cual "si al final esos proyectos no se realizan, la administración tendrá que pagar el 20% del coste a dichas empresas", por lo que, ha incidido, "ojo con seguir adjudicando cosas que no se van a hacer, porque nos va a costar dinero".