Los enfrentamientos entre manifestantes prodemocráticos y la policía en Hong Kong se han saldado este viernes por la noche con 28 detenciones y 10 personas heridas tras cuatro noches de tensión en el barrio de Mong Kok, informaron este sábado medios locales.

Una operación policial que empezó el pasado martes y se prolongó durante 48 horas acabó esta semana con uno de los tres asentamientos del movimiento a favor de mayores libertades democráticas que existe en la ciudad desde hace dos meses.

Las protestas han vuelto al barrio de Mong Kok en la madrugada del viernes al sábado, cuando cientos de manifestantes han tratado de tomar las calles del distrito y han acabado enfrentándose con la policía.

Los agentes han vuelto a usar gas pimienta, porras y escudos para contra los manifestantes.

Alrededor de la media noche hora local (16:00 GMT), cientos de ciudadanos han comenzado a reunirse en la intersección de las calles Arglye y Nathan, donde desde el 28 de septiembre y hasta el pasado miércoles los manifestantes habían acampado.

Bajo consignas como "Quiero auténtico sufragio universal", los manifestantes han intentado parar el tráfico utilizando contenedores de basura, a la vez que han lanzado huevos y botellas de agua a la policía, según recogieron medios locales.

La situación se tornó caótica, según han señalado testigos, y la policía cargó contra los manifestantes.

Como resultado del enfrentamiento, se han producido 28 detenciones y una decena de personas, algunas de ellas policías, han necesitado atención sanitaria, informó la emisora local RTHK.

Este nuevo incidente se ha producido dos días después de que la policía y agentes judiciales acabaran con las barricadas del campamento prodemocrático en el barrio de Mong Kok, en una operación que duró dos días y en la que participaron 6.000 agentes.

Cerca de 200 personas han sido detenidas, entre ellas dos de los líderes de las protestas, y más de medio centenar han sufrido heridas desde que la operación de desalojo de Mong Kok empezó hace dos meses.

Las organizaciones estudiantiles que encabezan las protestas, la Federación de Estudiantes de Hong Kong y Scholarism, han sido muy críticas con la actuación policial de estos días, que han calificado como desmesurada.

Asimismo, colectivos de periodistas han denunciado la detención de varios profesionales de la información durante los enfrentamientos.

Las agrupaciones estudiantiles han pedido este viernes a los manifestantes que abandonen el área de Mong Kok y concentren sus esfuerzos en los distritos de Causeway Bay y Admiralty, donde aún quedan barricadas. Sin embargo, este llamamiento no ha sido secundado.

Además, la Federación de Estudiantes se está planteando intensificar las protestas con la toma de edificios gubernamentales como nuevo paso para exigir mayores libertades democráticas para la ciudad.

El líder de Scholarism, Joshua Wong, que fue liberado bajo fianza el pasado jueves tras su arresto durante la desocupación de Mong Kok, pidió este viernes que el movimiento prodemocrático siga en funcionamiento, a la vez que condenó la violencia empleada por la policía durante su detención el pasado miércoles.