El Registro Civil de Córdoba ya ha inscrito el fallecimiento de los niños Ruth y José, asesinados por su padre, José Bretón, en octubre de 2011, dando con ello cumplimiento a la sentencia de la Audiencia Provincial de Córdoba, tras el auto de ejecución dictado por la Sección Tercera.

Fuentes jurídicas han informado de que este paso era requisito indispensable para que fueran entregados a la madre de los niños, Ruth Ortiz, sus restos, hallados en la finca Las Quemadillas, propiedad de la familia paterna de los menores.

Sin embargo, aún se desconoce con exactitud cuándo y cómo se le entregarán dichos restos, que ahora se custodian en sede judicial, ya que "aún faltan algunos requisitos, y la ejecutoria de la sentencia también establece que se ha de dar audiencia a las distintas partes personadas en el procedimiento para que aleguen lo que estimen oportuno en relación a la forma de entrega de los mismos".

Es expreso deseo de Ruth Ortiz, según han informado fuentes familiares, que no se publicite cuándo se le entregarán los restos, ya que quiere darles sepultura entre los suyos, en la intimidad.

Ruth Ortiz ha reclamado en reiteradas ocasiones durante todo este procedimiento, que se ha prolongado por casi tres años, que le fueran entregados los restos de sus hijos, alegando, a través de su abogada, "razones humanitarias".

Sin embargo, encontró el rechazo de la Audiencia Provincial de Córdoba y del Tribunal Superior de Justicia de Andalucía, que entendían que esto solo podría hacerse efectivo en tanto que la sentencia contra José Bretón fuera firme.

La Sección Tercera de la Audiencia Provincial de Córdoba ha ordenado la ejecución de la sentencia contra José Bretón, que le condena a 40 años por el asesinato de sus hijos, Ruth y José, en septiembre de 2011.

El auto de ejecución de la sentencia, además de lo relativo a los restos, da firmeza a la condena de privación de libertad contra Bretón, y ordena que se pida al condenado que abone la indemnización de 500.000 euros establecida para Ruth Ortiz; 137.000 euros al Ministerio del Interior y otros 22.500 euros al Ayuntamiento de Córdoba.

Asimismo, decreta el juez que se entregue a la madre los juguetes de los niños que fueron usados como prueba de cargo durante el juicio y la destrucción de la mesa metálica con la que Bretón construyó la "pira funeraria" en la que quemó a sus hijos.