Todo el mundo sabe que Superman es un alienígena criado por humanos que obtuvo grandes poderes del Sol y los usó para hacer el bien, que el Capitán América es fruto de los experimentos de EE UU durante la Segunda Guerra Mundial y que Batman es en realidad el multimillonario Bruce Wayne, quien de niño quedó huérfano cuando un atracador asesinó a sus padres.

Sus historias se han contado cientos de veces —en cómics, películas y series de televisión—, tantas que su vestimenta, enemigos y muchas de sus historias ya han pasado a formar parte de la cultura popular. Pero, ¿dónde queda la sorpresa ante héroes y tramas que todo el mundo conoce? Para combatir la falta de originalidad, los guionistas suelen recurrir a impactantes giros argumentales, cambios drásticos en los personajes y versiones alternativas de los mismos.

La editorial Marvel anunció hace poco un par de esos cambios radicales que afectarán a dos de sus superhéroes más carismáticos, Thor y el Capitán América. Por un lado, el dios del trueno pasará a ser una mujer, no se sabe aún debido a qué circunstancias, mientras que Steve Rogers cederá su puesto como Capi a su buen amigo Sam Wilson, el hombre afroamericano que hasta ahora combatía el mal bajo la identidad de El Halcón.

No es la primera vez que Thor adquiere género femenino ni tampoco la primera que un negro viste el traje de barras y estrellas, aunque nunca había sucedido en la línea canónica de los cómics (al menos, no exactamente). El hijo de Odín apareció como mujer en la saga Tierra X, una serie de cómics en la que se narran los acontecimientos de un supuesto futuro del universo Marvel. En esa realidad, el malvado hermano de Thor, Loki, había convencido a su padre de que la mejor lección de humildad que se le podía dar al portador del martillo Mjolnir era transformarlo en mujer. ¡El machismo está a la orden del día entre los dioses nórdicos!

En ese mundo, todos los superhéroes han sufrido cambios muy llamativos: Iron Man es un anciano que vive encerrado en una fortaleza, Coloso es el zar de Rusia, Peter Parker es un fofo agente de policía... Una de las modificaciones más llamativas es la de Hulk. Él y Bruce Banner se han separado definitivamente pero siguen dependiendo el uno del otro. Mientras que el primero ha adquirido el aspecto de un monstruo verde de aspecto simiesco, el segundo es un niño ciego que sólo ve a través de los ojos de su bestial compañero.

Aunque la historia se planteó inicialmente como el futuro oficial del universo Marvel, acabó convertida en una más de las infinitas realidades alternativas que componen el multiverso de la editorial. Justo lo contrario pasó con el primer Capitán América negro, concebido como historia alternativa pero finalmente incluido en la cronología oficial.

Este relato se cuenta en Capitán América: La verdad (Truth: Red, White & Black), un cómic que cuenta cómo el Ejército de dicho país usó a negros como conejillos de indias durante la Segunda Guerra Mundial para desarrollar el suero del supersoldado que convirtiría a Steve Rogers en el Capitán América. Muchos murieron durante los experimentos, pero algunos resistieron el tratamiento. Uno de ellos, Isiah Bradley, imbuido con nuevas capacidades sobrehumanas, decidió robar el uniforme y el escudo del Capi y se lanzó a una misión suicida.

La historia levantó una gran polémica en Estados Unidos, aunque obtuvo grandes alabanzas de la crítica profesional y acabó convirtiéndose en una de las mejores historias recientes sobre el personaje. La inclusión de esta trama en la línea oficial de la editorial dio pie a la creación de Elijah Bradley, nieto de Isaiah y miembro fundador de los Jóvenes Vengadores bajo la identidad del Patriota.

El cambio de género o de raza no han sido, ni de lejos, las modificaciones más impactantes que han sufrido los superhéroes a lo largo de su historia. El propio Thor, en manos del dibujante Walter Simonson, pasó una temporada convertido en una rana, mientras que en el universo Ultimate (una versión del mundo Marvel actualizada al siglo XXI) es un hippie implicado en el activismo político y social.

El Nick Furia más popular actualmente, el que posee el rostro de Samuel L. Jackson, en realidad también procede de esa cinematrográfica y alternativa línea Ultimate. El personaje original era un exmilitar estadounidense de raza blanca y pelo canoso.

Hulk también ha experimentado múltiples mutaciones que han cambiado no tanto su aspecto como su personalidad, inteligencia y color. Una de sus versiones más peculiares es la de Hulk Gris, más pequeña y débil que la principal, pero también más inteligente. Entre sus historias más extrañas, Hulk Gris trabajó en Las Vegas como guardaespaldas para un hombre de negocios que le puso el apodo de Mr. Arréglalotodo.

Uno de los cambios más insólitos del universo Mavel lo sufrió Punisher (El castigador) en 2010. Tras ser despedazado, un grupo de monstruos lo devolvió a la vida como una especie de monstruo de Frankenstein apodado Franken-Castle. Ningún cambio radical permanece durante mucho tiempo en los cómics, así que Punisher no tardó en volver a ser humano.

Para permitirse cambios contundentes y perdurables, ahí están las realidades alternativas, como Marvel Zombies, donde casi todos los héroes y villanos se han convertido en muertos vivientes; el universo Noir, en el que los personajes (sobre todo Spider-Man) se ven implicados en historias propias cine negro y la literatura policíaca; Mangaverse, un intento fallido de atraer nuevos lectores reinventando a los personajes Marvel al estilo manga; o 1602, una realidad en la que los superhéroes han surgido más de tres siglos antes que en la línea temporal oficial. En este mundo, Magneto es un inquisidor, Daredevil es un bardo ciego, Furia es el espía de confianza de la reina Isabel I de Inglaterra y el Doctor Extraño, el médico de cabecera de la soberana.

La editorial DC Comics también cuenta con un buen número de superhéroes alternativos. De hecho, se llegaron a crear tantos que la compañía tomó la decisión de destruir su vasto multiverso y tenerlo más controlado a partir de entonces. Lo hizo en la épica saga Crisis en Tierras Infinitas.

DC puede presumir de tener uno de los superhéroes alternativos más aclamados, el Superman comunista, quien luce en el pecho unan hoz y un martillo en vez de su característica "s". Su historia se cuenta en Superman: hijo rojo, cómic que desarrolla la idea de que el poderoso kryptoniano hubiese aterrizado en la Unión Soviética en vez de en Estados Unidos. Otro Superman muy conocido es el algo envejecido y canoso protagonista de Kingdom Come, donde se muestra un futuro alternativo del universo DC.

El héroe ha tenido además varias contrapartidas malvadas, aunque ninguna tan surrealista como el cruel Superman transformado en centauro por los dioses griegos.

El otro personaje icónico de DC, Batman, también ha aparecido en numerosas ocasiones envejecido, aunque esas versiones están lejos de ser las más llamativas. En una realidad alternativa, existe un equivalente nazi del Hombre Murciélago, mientras que en otra es un terrorífico vampiro. La mayor colección de variantes de Batman se encuentra en la saga Batman: El regreso de Bruce Wayne, donde el famoso multimillonario es desterrado a la Prehistoria y avanza a través del tiempo encarnando al Caballero Oscuro en diferentes épocas. De este modo, surgen un Batman cavernícola, un Batman pirata, un Batman cowboy...

En este punto, los cambios de género y de raza seguro que ya no parecen tan impactantes.