Andalucía ha registrado 512 casos de contaminación atmosférica entre 2007 y 2014. Los últimos tres episodios tuvieron lugar el pasado mes en Sevilla y el causante fue el ozono, según datos publicados por la Consejería de Medio Ambiente y Ordenación del Territorio.

La unión de ozono y altas temperaturas ha provocado que se superasen los niveles permitidos hasta en 141 ocasiones en estos siete años. Sevilla capital y su área metropolitana ha sido de las más afectadas, pero también zonas como Matalascañas (Almonte, Huelva). Y es que el ozono que llega a esta zona situada junto al Parque Nacional de Doñana se forma a unos cuantos kilómetros de distancia, según Ecologistas en Acción.

Concretamente en el polo químico de Huelva, donde hay presencia de compañías petroleras. Según el colectivo ecologista, también se han dado casos puntuales en el Parque Natural de Cabo de Gata (Almería), aunque el centro emisor del gas sea la central térmica de Alcornocales.

No obstante, según los informes de la Junta ha sido el ácido sulfhídrico (puede llegar a ser letal en grandes cantidades) el que ha generado la mayoría de los episodios (371). En esta ocasión, ha sido el Campo de Gibraltar o la localidad de Sanlúcar de Barrameda (Cádiz) las zonas donde saltaron las alarmas.

Ecologistas en Acción explica a 20minutos que este ácido, el ozono y las partículas en suspensión son los principales contaminantes del aire en la comunidad. El tráfico de las grandes ciudades (Córdoba, Granada, Málaga y Sevilla)y los grandes polos industriales (la zona de La Línea-Algeciras y Huelva) los generan.

La organización reclama tanto a ayuntamientos, como a la Administración regional que informe a la población cuando se superen los niveles permitidos por televisión, radio y las redes sociales.

Los ecologistas recuerdan que los consistorios deben contar con planes de contingencia contra episodios así, que incluyan medidas como el corte del tráfico rodado o pedir a la población que se resguarde en sus casas, según las necesidades. Yreclaman a las grandes ciudades "buenas políticas de movilidad" y que apuesten por una "gran red de transporte público y alternativas al vehículo privado".